La Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre del año no suele ser positiva y la de 2016 no ha sido una excepción. Las cifras arrojan 11.900 parados más y 64.600 empleos menos que en el cuarto trimestre de 2015. ¿Por qué estos datos no son equivalentes? Porque la población activa ha caído en 52.700 personas entre enero y marzo, lo que sugiere que muchas de las personas que han perdido su empleo han abandonado el mercado laboral y ya no aspiran a conseguir otro trabajo.
Si trazamos un perfil para ver qué sector de la población ha salido más perjudicado de la evolución del empleo en la primera parte del año, podríamos decir que se trataría de una mujer española de entre 35 y 39 años con un contrato temporal a tiempo completo en una empresa privada dedicada al sector servicios. Las personas que encajan en esta descripción son las que más han sufrido la destrucción de empleo estos meses.
Para sacar este perfil hemos analizado las cifras de la EPA, que ponen de manifiesto que la economía ha destruido empleo en casi todos los sectores, pero con especial virulencia en el sector servicios. En el primer trimestre el sector servicios pierde mucho empleo por la coincidencia de la Navidad y, este año, la Semana Santa, que cayó en marzo. Estos periodos vacacionales hacen que este sector contrate y despida a mucha gente esos días, sobre todo en parcelas como la hostelería o el turismo.
Así, entre enero y marzo se destruyeron 53.400 empleos en el sector servicios, prácticamente el doble que en la construcción, el segundo sector más perjudicado en este periodo. Solo la industria creó empleo en el primer trimestre. Las mismas razones explican la destrucción de empleo temporal en el periodo analizado, que alcanzó los 106.000 puestos de trabajo. El trabajo indefinido, en cambio, creció en 52.400 personas.
Más mujeres al paro
Al analizar los tipos de persona que más han sufrido la destrucción de empleo, la estadística revela que las mujeres han salido peor paradas en el arranque de 2016. Así, un total de 48.600 mujeres perdieron su empleo en la primera parte del año, mientras que solo 15.900 varones se vieron en la misma situación. Por nacionalidad, los españoles perdieron más empleos que los extranjeros.
Las personas más mayores consiguieron colocarse en el mercado de trabajo y los más jóvenes se fueron al paro
Las cifras por edades reflejan curiosamente que los más mayores, las personas de más de 54 años, se anotaron los mayores incrementos del empleo, mientras que los de entre 20 y 40 años fueron los que más puestos de trabajo perdieron. En concreto, la bajada más importante se observó en el grupo de 35-39 años, con 40.600 ocupados menos.
Y todo el empleo destruido en el primer trimestre pertenecía al sector privado, lo que demuestra que muchas empresas no acaban de percibir los efectos de la recuperación económica, a pesar de lo que dice el Gobierno. En concreto, este sector destruyó 82.100 puestos de trabajo entre enero y marzo, mientras que el sector público creo 17.600.
Aun así, el sector privado sigue siendo el responsable de la mayor parte del empleo en España y da trabajo a 15,01 millones de españoles, frente a los 3,01 que trabajan en el sector público. En los dos últimos años el empleo público ha crecido gracias al aumento de la tasa de reposición en muchos sectores.
Crear 470.000 empleos al año
A partir de todas estas cifras, se puede afirmar que las mujeres españolas de entre 35 y 39 años con un contrato temporal a tiempo completo en una empresa privada dedicada al sector servicios son las más han sufrido la destrucción de empleo estos tres meses.
En cualquier caso, la tasa de paro se situó en el 21% a finales de marzo, y lleva ya casi cinco años por encima del 20%. El Gobierno espera reducirla hasta el 19,9% este año y al 17,9% en 2017 creando 470.000 empleos al año durante los próximos cuatro ejercicios y creciendo a una media del 2,5% en 2018 y 2019.
