El Ministerio de Interior del Gobierno de Mariano Rajoy imputó gastos sospechosos a las campañas electorales que tuvieron lugar entre 2015 y 2017, como la compra de sillones de cuero o gastos de restauración, según denuncia el Tribunal de Cuentas.
Este órgano ha publicado un informe en el que fiscaliza los gastos de este Ministerio en la gestión y desarrollo de procesos electorales en el periodo 2015-2017, en el que se celebraron en España 7 citas electorales con un presupuesto total de 439 millones de euros. Jorge Fernández Díaz lideró esta cartera hasta noviembre de 2016, cuando fui sustituido por Juan Ignacio Zoido.
Según detalla en su informe, hay pagos que el Ejecutivo justificó con cargo a la campaña electoral y que no encajan, bien porque se produjeron tiempo después de que se celebran las elecciones o bien porque el objeto del gasto no está relacionado con los comicios.
Por ejemplo, el Tribunal de Cuentas relata que el Ministerio de Asuntos Exteriores y Competitividad se gastó 1.208,26 euros en comprar cinco sillones de cuero para la Embajada de España en la capital de Polonia.
"En el expediente relativo a la Embajada de España en Varsovia, se incluye como gasto electoral la compra de cino sillones de cuero que no se realiza hasta después de las elecciones (la fecha de la venta según la factura es el 10 de junio de 2015, se incluyen en el inventario el 16 de junio de 2015 y la fecha de acta de recepción es el 23 de junio de 2015) por valor de 1.208,26 euros", subraya.
Comidas sin justificar
Otro ejemplo de las malas prácticas que persigue la institución es el de una factura en concepto de restauración por parte de la Junta Electoral Provincial de Cádiz con fecha de 9 de junio de 2015, posterior a la celebración de las elecciones.
Esta Junta presentó después una factura que teóricamente justificaba que la comida se produjo el día 24 de mayo, pero el Tribunal señala que no se hizo referencia "ni al precio ni a la fecha de la factura, por lo que se desconoce si la certificación se refiere o no a la misma factura".
Se dan otras infracciones como que en Cuenca se pagaron 77.000,40 euros en concepto de "dietas de los miembros de mesas electorales (...) cuando el crédito asignado a ese concepto presupuestario era de 73.629,39 euros".
Servicios informáticos o de material de limpieza
En Madrid se hicieron contratos sin explicar de forma concreta qué vinculación tenían con las elecciones. Por ejemplo, "con motivo de la celebración de las Elecciones [...] para atender obligaciones que generan su organización y puesta en funcionamiento, resulta necesaria [...] la contratación de un servicio informático, el suministro de material de imprenta o el suministro de material de limpieza".
En la cuenta justificativa de Ávila se presentan 12 facturas de restauración (por importe total de 1.149,93 euros), "en las que no se detalla el número de comensales", por lo que resulta imposible comprobar si se cumple el límite de gasto establecido por comensal.
Lo mismo ocurre en la cuenta justificativa de Córdoba, en la que se incluye una factura de restauración por importe de 1.128,60 euros en la que no consta ni el número de comensales ni el tipo de comida de que se trata (desayuno, comida o cena).
"También se incluye una factura por valor de 184 euros para 7 comensales, excediendo de los límites que establecen las Instituciones Económico-administrativas. "Asimismo, se incluye una factura de restauración por importe de 290 euros en concepto de almuerzo de diez comensales, superando los límites establecidos en las IEA", agrega.
Elecciones en 2015, 2016 y 2017
En el año 2015 se celebraron elecciones autonómicas en Andalucía (22 de marzo), elecciones autonómicas y municipales (24 de mayo), las de Cataluña (27 de septiembre) y las generales (20 de diciembre).
Del año siguiente se han fiscalizado la repetición de las generales (26 de junio de 2016) y las elecciones de Galicia y País Vasco (25 de septiembre de 2016); y de 2017, las elecciones de Cataluña, del 21 de diciembre.