Trece se despide de su histórica productora. Este mes de enero, los obispos han decidido cerrar Valtierra Producciones, productora ligada a la cadena de televisión desde que ambas fuesen fundadas en 2010.
La decisión, recogida en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) de este martes, es la culminación de un proceso que empezó hace casi dos años. Después de trasladar las instalaciones de la cadena a la sede de la COPE, Trece decidió integrar todos los recursos materiales y humanos de la compañía en la cadena y proceder a extinguir la productora como tal.
En un principio, Valtierra daba servicio tanto a Trece como a otras cadenas, pero finalmente terminó siendo un proveedor casi exclusivo de Trece, de ahí su integración. Según explican desde la cadena, la marca "Valtierra" se conserva para explorar futuras oportunidades comerciales.
Desde su nacimiento, Trece arrastra importantes pérdidas económicas que ya superan la cuantía de los 90 millones de euros. En 2018, últimos datos disponibles, la compañía terminó con unas pérdidas de 7,6 millones de euros. Si bien es una cifra elevada, también es verdad que son los 'mejores' resultados de su historia. En 2011, los números rojos llegaron a superar los 15 millones.
Valtierra Producciones, constituida a la par que Trece, nació con un capital social de 3.100 euros y en 2018 declaró unas pérdidas de XXX euros. Además, según se desprende de las cuentas de la cadena depositadas en el Registro Mercantil, la facturación de servicios de producción con la productora se redujo a la mitad en apenas un año: de cuatro millones a dos millones. No obstante, es el proveedor más importante para la cadena en términos de gasto.
Al cierre de 2018, Valtierra también redujo su patrimonio neto desde los 746.174 euros hasta los 623.911 euros y pasó de unos beneficios de 162.941 euros a registrar 122.263 euros de pérdidas.
Los obispos, dueños (casi) totales
Además de la reorganización interna de la compañía, el accionariado de la cadena también ha sufrido cambios en los últimos meses. La Conferencia Episcopal, que siempre ha tenido un paquete mayoritario de acciones, ostenta desde hace meses el 98% del capital. Antes tenían un 78%.
Este salto se produce después de que los obispos hayan convertido un préstamo de 28,5 millones que habían hecho a la cadena de televisión en capital. Esta fórmula se suele utilizar cuando el prestatario (en este caso, Trece) no es capaz de cumplir con los compromisos de pago establecidos con su prestamista.
Además de la Conferencia Episcopal, Otros accionistas del grupo son Unidad Editorial, Beta Films, Shandwick AGR Comunicación, Radio Popular, Video Mercury Films (Enrique Cerezo) y el Arzobispado de Madrid.