La hostelería se ha visto obligada a modificar sus previsiones de Navidad, que hace unos días apuntaban a que sus ingresos se situarían solo un 10% por debajo de los logrados en el mismo periodo de 2019. De hecho, los dueños de los bares y restaurantes prevén caer el doble de lo esperado, debido al elevado número de cancelaciones que están registrando desde el pasado fin de semana.
Si hace unos días recibían cientos de llamadas para no seguir adelante con cenas de empresa o encuentros de grandes organizaciones, la hostelería se enfrenta ahora a una oleada de cancelaciones también de grupos pequeños, de familias o amigos. Con la Nochebuena y el día de Navidad a la vuelta de la esquina, el temor de los españoles es contagiarse antes de esas fechas señaladas, o ser contacto estrecho de alguna persona contagiada. "A finales de la semana pasada vimos que se habían disparado los contagios, eso afecta a la confianza de la gente, que creen que ir a comer o cenar fuera es asumir riesgos innecesarios", apuntan fuentes de Hostelería de España.
En este sentido, "se han empezado a producir cancelaciones de pequeños grupos, cuando hasta la semana pasada afectaba solo a comidas o cenas grandes y multitudinarias". Si los empresarios hosteleros preveían caer solo un 10%, respecto al último año prepandemia, esta situación sitúa ahora sus estimaciones en ingresar entre un 20% y un 25% menos que entonces. "Calculamos en total que registraremos una facturación en Navidad de entre 8.500 y 9.000 millones de euros; son cerca de 3.000 millones menos que ese año", explican desde la patronal. En 2019, los locales hosteleros españoles ingresaron en el periodo navideño unos 12.000 millones de euros.
Se trata de un empeoramiento de las ventas previstas en un momento en el que la hostelería estaba remontando el vuelo. De hecho, durante el puente de diciembre los locales hosteleros registraron buenos resultados, pese a que el pasaporte covid estaba ya en vigor en varias comunidades.
La hostelería aguanta el golpe
Como contó Vozpópuli, las cancelaciones de las reservas llegaban hace menos de una semana al 20%. No obstante, la cifra "ha subido mucho este fin de semana, pero no nos atrevemos a dar un nuevo número aún", apuntan los representantes de los hosteleros, que no descartan que se haya doblado ya.
Con el pasaporte covid en vigor para acceder a locales de restauración en comunidades como Navarra, Cataluña, Galicia, Murcia, la Comunidad Valenciana, Aragón, Galicia o Baleares, los empresarios hosteleros consideran que no está teniendo impacto en el consumo, pese al temor inicial de que influyera a la hora de acudir a estos locales.
No en vano, segmentos como los de las discotecas ya se han lanzado a pedir su obligatoriedad en todo el territorio. "Urge encontrar fórmulas que motiven al público, y particularmente a los jóvenes, como hacer obligatorio el certificado en los locales de ocio, en la cultura, los espectáculos, incluso en los establecimientos hosteleros de mayor aforo", explicaba a comienzos de diciembre patronal de las discotecas, España de Noche, que añadía: "En un momento en los que España disfruta de los mejores datos epidemiológicos de Europa, es fundamental utilizar herramientas que incentiven la vacunación y no perjudicar a la actividad económica de las pymes, especialmente del ocio".
Las cancelaciones hosteleras comenzaron a llegar a la vez que el alud de peticiones de información que, como contó este periódico, están recibiendo los despachos de abogados por parte de algunas compañías que sí quieren seguir adelante con su cena de Navidad. En este caso, son muchas las empresas que desde hace unas semanas sopesaron la posibilidad de introducir medidas como exigir PCR o antígenos antes de acudir, certificado de vacunación en la puerta del encuentro o incluso habilitar mesas de no vacunados, a petición de algunos trabajadores.