Miles de personas se han echado esta tarde a las calles de Barcelona en defensa de una sociedad más feminista y de la que queden desterrados de una vez por todas todos los símbolos del patriarcado. Junto a los 50.000 ciudadanos anónimos que, según la Guardia Urbana, han participado en la fiesta feminista y a pesar de la amenaza del coronavirus, se han manifestado también representantes de la clase política como la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, y el presidente del Parlament, Roger Torrent.
La marcha, que forma parte de la huelga feminista del 8M, ha comenzado a las 17.00 en la Plaza Universitat y, a lo largo de la misma, los participantes han coreado todo tipo de lemas, aunque los más aplaudidos han sido los de "sola y borracha quiero llegar a casa", "el patriarcado me da patriarcadas" y "no estamos todas, faltan las asesinadas".
En medio del ambiente festivo, varias han sido las políticas catalanas que han participado en la movilización. Es el caso de la diputada de ERC Marta Vilalta, quien ha aprovechado la ocasión para unir las reivindicaciones feministas con las del separatismo. "La revolución feminista y la revolución catalana, democrática y republicana, van de la mano", ha dicho la portavoz de los republicanos.
"Menos lacitos y más dinerito"
También se ha pronunciado la diputada del PSC Eva Granados, quien ha remarcado la importancia de lograr la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en "el trabajo y en el ámbito doméstico". Granados también ha exigido el fin de la violencia de género y acabar con la brecha salarial: "Una de cada tres mujeres del sector de cuidados y servicio doméstico está en el umbral de la pobreza".
Granados, además, ha exigido al Govern que preside Quim Torra que incremente la inversión en materia de igualdad. En este sentido, ha sido contundente al advertir de que "el gasto es insuficiente", según informa Europa Press. "Menos lacitos", ha añadido", "y más dineritos en los presupuestos de género".
La portavoz de En Comú-Podem en el Parlament, Susanna Segovia, ha vinculado, por su parte, el feminismo con el sistema económico asegurando que las mujeres reivindican que "se pongan por delante los cuidados, las personas y el trabajar para combatir la brecha salarial". Segovia ha añadido que, junto con el movimiento ecologista, el feminismo "va a ser la semilla de transformación de la sociedad". "Es un movimiento que interpela a hacer un cambio en esta sociedad patriarcal", ha concluido, "que condena a las mujeres a esta violencia sistémica y machista".
