Las cúpulas de las cajas de ahorros que controla el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) temen que después los expedientes abiertos a la CAM haya un efecto contagio y también se abran alegaciones contra ellas. El FROB intervino la caja alicantina el pasado ejercicio y la semana pasada abrió un proceso sancionador a 49 personas del consejo de administración, comité de auditoría y comité de dirección, incluidos los directivos que abandonaron la firma con indemnizaciones millonarias. En las altas esferas de Unnim, Catalunya Caixa y Novagalicia, en poder del fondo, hay temor a que ocurra lo mismo. No sólo de los que quedan, sino de los que han estado recientemente.
La diferencia es que estas tres entidades, aunque están en poder del FROB, no están intervenidas técnicamente, es decir, sus consejos de administración no han sido relevados. En estos casos, el organismo dependiente del Banco de España tiene representantes, pero no lo ha relevado como sí hizo con la CAM o, anteriormente, Cajasur o CCM.
Fuentes cercanas al Banco de España indican que el organismo de momento está a la espera de que venza el periodo de alegaciones de los afectados de 20 días y que la reacción social y la presión mediática tendrán mucho que ver en el devenir futuro.
Filtraciones
De hecho, las indemnizaciones millonarias conocidas en el pasado de CAM o Novagalicia fueron filtradas oportunamente para que el escándalo social creara el ruido mediático necesario, no en vano, estos despidos estratosféricos eran legales y tenían el visto bueno del consejo de administración.
Las fuentes reconocen que la exigencia de responsabilidades a antiguos gestores de las cajas es una cuestión que se ha dejado abandonada durante mucho tiempo y que la reacción generalizada a los expedientes de la CAM ha sido favorable, aunque criticando su retraso.
Y aseguran que "pase lo que pase, lo que es seguro es que ahora mismo están más que preocupador por que pueda tener lugar un 'efecto contagio' desde la CAM a ellos".
Conviene recordar que a finales del pasado mes de septiembre, el actual gobernador del Banco de España calificó a la CAM como “lo peor de lo peor” y no descartó entonces la apertura de expedientes, que han tardado casi cinco meses en llegar.
Las fuentes consultadas comentan que en la CAM se conjugan malas prácticas de gestión con auténticos desmanes y que, sin duda, algo de eso hay en las otras entidades cuyo control ha tenido que ser tomado por el FROB.
Los expedientes se saldarán por la vía civil y no penal. Conforme establece la Ley de Economía Sostenible, las sanciones pueden llegar a ser, como máximo, de un millón de euros.