El ocio de los españoles, cada vez más tecnológico pero también más casero, una industria que supone el 5,2% del PIB, no entiende de crisis, según un estudio que asegura que el gasto medio anual de una familia está en torno a los dos mil euros, aproximadamente el 7% de su presupuesto.

En hogares más pudientes, los que pueden ingresar mensualmente unos 5.000 euros, la inversión anual en ocio llega hasta los 5.500, más o menos el 9% de su presupuesto total, mientras que en los más modestos no se supera los 500 euros anuales, el 3,6% del dinero con el que cuentan para vivir doce meses.

El estudio, elaborado por un destacado grupo de especialistas en la materia, muchos de ellos profesores universitarios, a instancias de la Fundación de las Cajas de Ahorros (FUNCAS), concluye que las actividades de ocio más frecuentes y masivas son la televisión y el fútbol, además del ocio digital, frente a la lectura, el arte, el cine o la música clásica, más minoritarias.

A pesar de que cada vez más españoles participan y disfrutan de actividades de ocio, y de que cada vez la oferta es más diversa, el estudio se lamenta del todavía escaso hábito de lectura y de la práctica deportiva, "en comparación con otros países del entorno". Hace hincapié en el "extendido" hábito de la televisión, "con escasos contenidos educativos", y en materia cinematográfica fija su mirada en "un público concentrado en las superproducciones más taquilleras" y alejado del cine de autor.

También alerta de la "deficiente educación musical en las escuelas" y de las consecuencias que ello puede tener en la vida adulta, y de que "una parte de la población esté excluida permanentemente de la experiencia turística".

La televisión imbatible mientras el DVD se hunde

Que la televisión es líder imbatible e indiscutible queda de manifiesto en el hecho de que cada ciudadano consume de media al día 234 minutos, casi cuatro horas, un 22% más que hace veinte años. El 84,5% de los españoles reconoce que "a diario o casi" se sienta frente al televisor.

En materia de cine, el estudio alerta del hundimiento del DVD, de que las salas de exhibición "se sostienen como pueden", que la televisión "resiste" y que es en la Red, en internet, donde está el futuro, a pesar de las reticencias, cuando no la oposición frontal, de la industria.

A los cines acuden, sobre todo, los menores de 24 años, generalmente con amigos, o en familia en el caso de los más pequeños, y durante el fin de semana o en días festivos en el 70% de los casos. El hecho de ir al cine se relaciona cada vez más con el de acudir a un centro comercial, donde la oferta de ocio es más amplia. A partir de los 35 la asistencia decae gradualmente, hasta alcanzar un 3,7% entre los mayores de 75 años.

Auge del ocio digital

Si hay un aspecto en el que incide especialmente el informe es en el auge del ocio digital, "creciente e imparable" y síntoma de "desarrollo", según Javier Echeverría, profesor de Sociología en la Universidad del País Vasco, para quien este auge "genera valor, habilidades y destreza, y, por lo tanto, es productivo".

El 95% de los jóvenes y adolescentes españoles utiliza internet en el día a día, casi siempre para divertirse y especialmente en casa, el 92,7% posee teléfono móvil, que utiliza también como instrumento de ocio, y en el caso de los menores de 18 años el 42,4% emplea entre cinco y seis horas semanales para jugar con videojuegos.

Para Echeverría, el ocio digital "es una nueva forma de socialización", más que "una utilización de tales o cuales herramientas para acceder a unos u otros contenidos".

Crisis de la televisión generalista

El estudio se fija en la "crisis" de la televisión generalista, en una televisión "menos musical, más participativa, menos institucional y gratuita, menos nacional y menos formativa", pese a lo cual se erige todavía en el principal instrumento de ocio de los españoles.

"La digitalización y los nuevos contenidos de la televisión -hace hincapié- no han variado el muy establecido hábito de ver televisión, ni el interés masivo por algunos géneros típicamente televisivos, sobre todo norteamericanos, y por la retransmisión de los grandes acontecimientos", especialmente deportivos y, más concretamente, futbolísticos.

El fútbol es, pues, "el máximo exponente" del ocio de los españoles. Además de su impacto sobre la economía -el 1,7 % del PIB, más de 8.000 millones de euros-, el empleo -genera unos 66.000 puestos de trabajo, directos e indirectos-, de ser el deporte más practicado, el género televisivo favorito y el espectáculo en directo más masivo, es, además, el tema de conversación más frecuente.