Bankia ha decidido finalmente no pujar por Unnim, lo que allana aún más el camino para que Ibercaja o el Banco Popular se adjudiquen el grupo catalán en una subasta en la que también participan el Banco Santander y el BBVA.
Tal y como era de esperar, la puja por el grupo catalán fruto de la fusión de Caixa Terrassa, Sabadell y Manlleu ha estado mucho más concurrida que la de la Caja del Mediterráneo (CAM), pues se han recibido al menos cuatro ofertas en firme.
El Banco de España ha cerrado este lunes el plazo para la presentación de ofertas vinculantes. Ahora, la comisión rectora del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) evaluará todas ellas con el fin de seleccionar la mejor en los primeros días de marzo.
Bankia buscará otras opciones
Según han informado fuentes próximas al proceso, la sorpresa ha sido que Bankia, después de estudiar en profundidad las cuentas de Unnim, ha llegado a la conclusión de que prefiere buscar otras opciones que encajen mejor con su estrategia de negocio.
Más previsible ha sido la retirada del fondo buitre JC Flowers, que finalmente tampoco se ha animado a llegar hasta la recta final del proceso, puesto que sus opciones eran "mínimas".
Unnim fue nacionalizada por el Estado en septiembre al precio simbólico de 1 euro. Poco después recibió una inyección de 568 millones de euros por parte del FROB, que controla el 100 por cien del capital.
Al cierre de septiembre, la entidad contaba con unos activos próximos a 30.000 millones de euros, y registraba unas pérdidas de 107 millones de euros debido al deterioro de la cartera crediticia e inmobiliaria y del impacto del coste de integración.
La puja se desinfla
Con la retirada de Bankia de la puja de Unnim se desinfla la tesis de quienes aseguraban que el Ejecutivo le había hecho un "traje a medida" para que pudiera hacerse con el grupo de cajas catalanas aunque su tamaño no aumentara un 20%.
El acceso a la auditoría de Unnim sirvió a Bankia para llegar a la conclusión de que en la segunda ola de fusiones puede haber oportunidades más interesantes, que una entidad que aporta una red de apenas 600 sucursales concentradas principalmente en Cataluña.
El Banco Santander y el BBVA coinciden en que pueden surgir mejores oportunidades, según las mismas fuentes. No obstante, los dos grandes bancos sí han remitido ofertas formales. En cualquier caso, ambas propuestas son tan exigentes que tendrán previsiblemente muy pocas posibilidades de ganar.
Por el contrario, el Banco Popular y especialmente Ibercaja, que se habían posicionado como favoritos en la puja, han remitido al Banco de España sus ofertas formales con ganas de ganar.
El Popular, inmerso en su fusión con el Pastor, ha preparado su oferta "a conciencia" porque si se hace con Unnim, recuperará la posición de quinto gran banco que le arrebató el Sabadell al ganar la CAM. Sin embargo, hay quienes afirman que Ibercaja tiene más papeletas para hacerse con Unnim y por eso su oferta "va a ser la mejor".
La caja aragonesa que preside Amado Franco estuvo al margen de la primera ola de fusiones y necesita ganar tamaño, por lo que sumar los cerca de 30.000 millones de activos de Unnim le haría acercarse a un volumen próximo a los 100.000 millones.
Algunos expertos añaden que podría ser el primer paso para que la saneada entidad engulla en un futuro próximo a otras que ahora tienen un tamaño mayor al suyo, pero una situación mucho más delicada como es el caso de Banca Cívica, a la que cada vez se le ven menos opciones para seguir en solitario.
