La presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, ha reivindicado este lunes la unidad política contra el terrorismo como un pilar la democracia que permitió derrotar a ETA, pero sus palabras han resonado en un hemiciclo semivacío, sin presencia de Vox, con una representación mínima del PP y en ausencia del presidente del Gobierno.
Como cada 27 de junio, Congreso y Senado han organizado este lunes el acto anual de homenaje a las víctimas del terrorismo, instaurado en 2010. La presidenta de la Camara Baja ha presidido el acto flanqueada por su homólogo de Senado, Ander Gil y, desde la tribuna de invitados ha asistido al homenaje el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo.
En su discurso, Batet ha hecho un reconocimiento público de las víctimas del terrorismo, que en su opinión "merecen el lugar más alto de reconocimiento por su mayor valor de ejemplaridad" de valores como la dignidad, la libertad, la verdad o la confianza en el imperio de la ley.
La derrota de ETA fue un éxito colectivo
"Quienes sufrieron el ataque (del terrorismo) resistieron el dolor, muchas veces inconsolable, la incomprensión y el silencio, ha dicho. Las víctimas, a pesar del sufrimiento provocado por la acción terrorista, mantuvieron el bien político más básico de la democracia: la razón frente a la barbarie".
A su juicio, "uno de los elementos de más hondo significado y alcance" fue la unidad política y social frente al terrorismo, a la que achaca el "éxito colectivo" de la derrota de ETA, hace ya once años. "Logramos que la democracia tuviera una sola voz frente a los violentos --ha afirmado--. Alcanzamos esa derrota gracias al esfuerzo por tender puentes y reunir a todos los demócratas en el único lado posible: el de la defensa de la vida, de la libertad y de la Ley".
Batet considera que "esa unidad contra el terrorismo debe legítimamente enorgullecernos a todos" y "forma parte de la constitución material de nuestro sistema democrático". "Es uno de los consensos básicos sobre los que se asienta nuestra vida en democracia --ha subrayado--. Hoy es también el día en que merece ser celebrada esa unidad".
Bildu sí acudió
El homenaje ha tenido lugar en el hemiciclo, donde sólo el PSOE ha enviado a un nutrido grupo de diputados, encabezados por su portavoz, Héctor Gómez. También han estado los portavoces Pablo Echenique (Unidas Podemos), Aitor Esteban (PNV), Mertxe Aizpurua (Bildu) y los diputados Juan Ignacio López-Bas (Ciudadanos), Sergio Sayas (Navarra suma), Ana Oramas (CC) e Ismael Cortés (En Comú).
Por parte del Gobierno y en ausencia del presidente, han acudido cinco ministros, los titulares de Interior, Fernando Grande-Marlaska; Justicia, Pilar Llop; Presidencia, Félix Bolaños; Industria, Reyes Maroto y Agricultura, Luis Planas. En representación del Gobierno vasco ha participado la directora de Derechos Humanos, Víctimas y Diversidad, Mónika Hernando.
Sin embargo, y por tercer año consecutivo, Vox se ha ausentado del acto, que considera "una mascarada", y ha convocado a la misma hora un minuto de silencio por las víctimas en la fachada principal del Congreso. Y el PP ha optado por enviar una representación institucional mínima, sus dos diputados que forman parte de la Mesa del Congreso: Ana Pastor y Adolfo Suárez Illana.
En declaraciones a los medios el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha mostrado su rechazado a lo que considera un "falso homenaje" por incluir al "brazo político" de ETA, a quien, ha denunciado el presidente del Gobierno, "tiende constantemente la mano".
Críticas de AVT y Covite
También se han descolgado del acto las principales organizaciones de victimas, entre ellas la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que considera que "no se puede homenajear a las víctimas del terrorismo y gobernar con el apoyo de los que son los herederos del brazo institucional de ETA", o el Colectivo de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco (Covite), cuya presidenta, Consuelo Ordóñez, considera que "homenajear a las víctimas del terrorismo en una institución en la que tienen representación partidos políticos que justifican la existencia de ETA y que no condenan la violencia terrorista es un ejercicio de cinismo".
Los mismos argumentos esgrime el vicepresidente de Dignidad y Justicia, Víctor Cotobal, para justificar su ausencia. "¿Cómo un Gobierno que se apoya en ETA va a hacer un homenaje a las víctimas el terrorismo?", se pregunta. La Asociación Plataforma de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo (APAVT) también se ha ausentado porque entiende que "para poder rendir homenaje a las víctimas, primero hay que respetarlas".
Antes del inicio de la sesión, Batet y Gil, acompañados del presidente de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Tomás Caballero, han saludado a los representantes de las asociaciones de víctimas del terrorismo que si han acudido, entre ellas la Federación de Asociaciones Autonómicas de Víctimas del Terrorismo (FAAVT).
Y ya en el hemiciclo, y además de los discursos de Batet y de Caballero, se ha guardado un minuto de silencio y se han interpretado dos piezas musicales a cargo de alumnos del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid.