Muchos puentes entre Cataluña y el resto de España están saltando por los aires en los últimos días. Algunos de ellos habían sido hasta ahora bastante sólidos al haber quedado fuera del debate político, como los referidos a ciencia y tecnología. En la semana anterior a la votación del 27 de septiembre, ha habido un antes y un después en la ciencia tras el manifiesto de 13 científicos liderados por el Investigador del cáncer Joan Massagué pidiendo el voto para Junts pel Sí argumentando un supuesto maltrato en los fondos para investigación: "La distribución de recursos económicos para investigación que hace el Estado no sigue siempre criterios estrictamente competitivos", aseguraban estos prestigiosos investigadores.
"Cataluña se lleva el 25% de los fondos de innovación cuando su contribución al PIB es sólo del 20%, ha dicho el portavoz de Cotec
Las palabras cayeron como una bomba en Cotec, la fundación para la innovación tecnológica. Su portavoz Jorge Barrero se mostró contrariado: "Me ha sorprendido en el ámbito de estas plataformas de ciencia a favor de la independencia el escaso rigor de los datos que manejan para ser científicos. A lo mejor en otros ámbitos sorprende menos, porque es un debate cargado de emociones y deseos y con ellos tenemos que ser respetuosos. Yo de emociones y deseos no puedo hablar, pero puedo hablar de datos, y el dato que no he visto publicado es uno que habla muy bien del sistema científico catalán y de su capacidad de competir". Barrero ha recordado que en Catalunya hay centros de investigación controlados por la Generalitat, por el Estado o mixto, y ha dicho que Cataluña se lleva el 25% de los fondos de innovación cuando su contribución al PIB es sólo del 20%. "Una caja común favorece a Cataluña, porque favorece a los más competitivos, así que al menos desde este punto de vista del plan nacional y de la caja única de ciencia, cualquier escenario de independencia sería una mala jugada".
La Ametic se resquebraja
Algo similar ha pasado en una de las patronales de nuevas tecnologías de la información más importantes del país, como es Ametic, que esta semana ha hecho al fin públicas unas discrepancias en su seno que venían larvándose hace tiempo. El pasado viernes, Ametic, que está dentro de la CEOE, emitía un comunicado en el que se declaraba con "honda preocupación" por la posibilidad de una secesión. "Cataluña siempre ha tenido un peso importante dentro de nuestro Sector y de hecho nuestra Asociación nació en Cataluña hace más de 40 años para defender los intereses y apoyar la internacionalización de una incipiente Industria Electrónica. Que esta Comunidad no formara parte de España y a su vez se viere aislada del resto de la Unión Europea, además de otros organismos internacionales, supondría un grave perjuicio para la sostenibilidad de las empresas y para el mantenimiento del empleo", decía este comunicado.
Sin embargo, desde Aseitec, una asociación que reúne a unas 300 pymes tecnológicas catalanas, este comunicado sentó mal y se denunció que "no ha habido debate suficiente para hacerlo. La asociación, perteneciente a la patronal desde 2011, se había adherido en mayo al Manifest del Far a favor del derecho a decidir junto a la patronal Cecot y no se vio reflejada por las palabras de la patronal. Como está ocurriendo en este movimiento independentista, la gran empresa dentro de Cataluña mantiene posiciones unionistas mientras que las pymes, como las que conforman Aseitec, se alinean con el independentismo.
El portavoz de Aseitec, Pedro Gómez, reconoce que aunque su postura en un principio no era a favor de la independencia, "se ha dejado pasar mucho tiempo sin intentar solucionarlo" y critica que el Gobierno amenace a los catalanes con quedarse fuera de Europa, "cuando lo que está en juego es si queremos estar en España". Las empresa tipo que integra su asociación es una compañía con "unos 15 trabajadores, sobre todo informáticos" y que realiza la mayoría de su facturación dentro de la propia Cataluña. Cree que la gente está preparada para asumir los sacrificios que supondrá la independencia: "Habrá un periodo de transición tras el cual se empezará a salir", asegura.
