Cataluña restringirá la movilidad diaria al ámbito comarcal salvo visitas a familiares durante las fiestas de Navidad, sin modificar el máximo de 10 comensales en casa, y establecerá franjas horarias en bares y restaurantes para que estén abiertos solo en las horas de las comidas.
El vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, y la consellera de Presidencia, Meritxell Budó, han explicado en una rueda de prensa telemática estas medidas "quirúrgicas", que suponen un "paso atrás" en el plan de desescalada.
"No podrá ser la Navidad que querríamos, sabemos que no vamos bien y ante la constatación de que el aumento de contagios no se ha estabilizado y continúa creciendo, el Govern ha decidido actuar porque hay que frenar la covid como sea, cueste lo que cueste", ha afirmado Aragonès.