El Partido Popular de Cataluña ha iniciado su renovación interna tras el mal resultado en las pasadas elecciones generales y municipales. La maquinaria se ha puesto en marcha con el objetivo de tener "grupo propio" en el Parlamento autonómico.
Los populares consideran un éxito aumentar su representación parlamentaria hasta "los siete u ocho diputados". Para ello, han iniciado cambios profundos a nivel comarcal en Barcelona, principal bastión del PPC en Cataluña.
Por ahora, la dirección provincial ha decidido implantar gestoras en seis de los diez distritos de Barcelona. Dos de estos distritos estaban en manos de Óscar Ramírez y Eduardo Bolaños, pero debido a sus otras responsabilidades en el Parlamento autonómico no pueden estar al cien por cien con los barrios. "Los presidentes de distrito tenían otras obligaciones y creemos conveniente dar también batalla en los barrios", han asegurado fuentes del PPC a preguntas de Vozpópuli.
La sentencia del 'procés'
"Queremos estar muy cerca de los distritos y barrios y para ello se han puesto gestoras al frente, gobernadas por personas de total confianza", han señalado las mismas fuentes de cara a un posible adelanto electoral. Los populares barajan varios escenarios para estos comicios, desde una convocatoria de Torra tras la sentencia del Tribunal Supremo sobre el juicio del 1-O, en primavera de 2020 o bien, como propone Carles Puigdemont, en octubre del próximo año.
Desde el Partido Popular aseguran que se trata de personas de toda confianza, pero remarca que las gestoras solo serán "eventuales", hasta designar a los miembros de la formación que se encarguen de las distintas agrupaciones.
Entre los siete y ocho concejales, el PPC espera obtener representación por Tarragona, Lérida y Barcelona, mientras que en Gerona, donde también acudirán para hacer campaña, es un territorio más complicado debido a la alta densidad de independentistas.
Los populares trabajan sobre el primero de estos escenarios para evitar sobresaltos. "Estaremos preparados por si se activa el más temprano", han apuntado fuentes de la formación, que no solo dará la batalla en Barcelona ciudad, sino también en otras juntas locales.
Algunos presidentes, como en Tarrasa, presentaron su dimisión al no lograr el objetivo señalado el pasado 26-M. Es el caso de Àlex Rodríguez, quien presentó su renuncia tras no obtener ningún concejal. Ante esta situación, el propio Rodríguez propuso a su 'número dos', Marta Giménez, para dirigir la gestora que se ha hecho cargo de la agrupación. En las pasadas municipales, el PP obtuvo en Cataluña 161.735 votos, frente a los 235.184 obtenidos en 2015. El PPC se ha situado en séptimo lugar entre los partidos con más apoyos en las urnas, por detrás de la CUP y Ciudadanos.
A juicio de los populares estos cambios son necesarios para levantar de nuevo al PPC, mientras aseguran que la falta de representación de Vox en las instituciones les ayuda ya que les penalizó en las pasadas generales pese a no tener representación.