La abogada Beatriz García Paesa ha explicado hoy en la nueva sesión del juicio del caso Erial que "nunca" le dijeron que el dinero de las cuentas creadas en el extranjero fuera de Eduardo Zaplana. La sobrina del espía Francisco Payesa fue la persona que creó la firma Imison Internacional que la UCO considera la matriz de la presunta red de blanqueo de capitales.
García Paesa ha reiterado que "a Zaplana no lo conozco" y que ninguna de las personas con las que trató los asuntos concernientes a la empresa y a los fondos depositados en Luxemburgo le hablaron de él.
"Su nombre nunca fue mencionado y jamás le dije a Belhot (el testaferro uruguayo) que los fondos eran de Zaplana", ha afirmado durante su intervención ante el tribunal.
Versiones contradictorias
Esta cuestión es llamativa porque entra en clara contradicción con lo afirmado por Fernando Belhot quien dijo que esta abogada fiduciaria conocía que los fondos eran de Eduardo Zaplana. El abogado de Zaplana también consiguió sembrar la duda de si las cuentas que el testaferro uruguayo afirmaba que sólo gestionaba para Zaplana en realidad eran de dinero suyo.
La abogada fiduciaria, Beatriz García Paesa, que tenía despacho en Luxemburgo sí ha señalado al fallecido Juan Cotino como la persona que llevó 640.000 euros para la constitución de Imison Internacional y que era su sobrino Vicente Cotino con quien despachó en los primeros años después de la constitución de la empresa.
De los Cotino a Barceló y Grau
Vicente Cotino es, según la declaración de García Paesa, la persona que le encargó abrir Fenix Investments de forma fiduciaria aportando el dinero en efectivo –que la UCO piensa que es de los beneficios de las adjudicaciones la concesión de las ITV en 1997 y del Plan Eólico en 2003–.
Las cantidades de dinero que se habrían derivado al extranjero de forma ilegal superan los 20 millones de euros y García Paesa ha explicado que Vicente Cotino se desplazaba a Luxemburgo "un par de veces al año" para realizar las reuniones con los bancos y que a partir de 2006 dejó de hacerlo al traspasar sus participaciones.
En ese momento entran en escena Joaquín Barceló, amigo de la infancia de Zaplana que aseguró durante el juicio que el dinero era del exministro; y Juan Francisco García (jefe de gabinete de Zaplana) que corroboró las adjudicaciones irregulares al grupo Sedesa de la familia Cotino.
Belhot, más tarde
García Paesa niega haber tenido ninguna relación ni conocer a Zaplana y le ha dado preponderancia al asesor financiero Francisco Grau que acudió junto a Barceló a Luxemburgo y que es la persona con la que trata todas las cuestiones de índole financiero desde ese momento.
La figura de Grau se mantuvo como la "referencia" para García Paesa hasta que en 2009 fue Fernando Belhot quien se hizo cargo de los fondos de Imison y Fenix, asegurando que desconoce quién fue la persona que introdujo al uruguayo en la gestión del dinero, aunque entiende que serían Grau y Barceló.
El comisario Villarejo
Otro de los momentos esperados del juicio es la declaración del comisario José Manuel Villarejo quien tenía que testificar a petición de Eduardo Zaplana y, aunque hoy ha acudido a la Ciudad de la Justicia de Valencia, no ha podido declarar al ser retrasada su comparecencia.
Villarejo ha afirmado ante los medios de comunicación que dirá "la verdad" cuando le toque hablar ante el tribunal. El excomisario de policía, inmerso en varias decenas de causas judiciales, explicó durante una comisión de investigación en el Congreso de los Diputados que "había un interés, no sé por qué, en destruir al señor Zaplana y se utilizó a un confidente del CNI sirio para ver las fórmulas".