El vicesecretario de Política Municipal y Autonómica del PP, Javier Arenas, desbloqueó a principios de esta semana la reforma local tras el almuerzo que mantuvo el pasado lunes con el ministro de Hacienda y de Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, según ha podido saber Vozpópuli. Se intenta agilizar una reforma que estaba congelada por el rechazo del poder local popular, del socialista y, por ende, de la FEMP, donde están representados los dos partidos mayoritarios, entre otros muchos.
Así, mientras avanzaban los cambios a la Ley de Bases de Régimen Local, la reducción del número de concejales y el establecimiento de unos barenos para determinar la remuneración de los alcaldes y del conjunto de las corporaciones municipales parecía dormir el sueño de los justos. Ante la parálisis existente, Arenas se reunió con Montoro con el objetivo de avanzar en una reforma que se pretende tener culminada entre finales de este año y principios del que viene.
Gobierno y PP meten la directa y buscarán cerrar la reforma local con o sin acuerdo total con los socialistas
La intención del Gobierno y del PP es sumar a este acuerdo a los socialistas. Para ello, los secretarios de política local del PP y del PSOE, Manuel Cobo y Gaspar Zarrías, respectivamente, volverán a reunirse la semana que viene. Fuentes populares indicaron que es en los temas institucionales "donde más empeño vamos a poner" en conseguir un acuerdo, esto es, en el capítulo competencial, que pretende cerrar la puerta a que los ayuntamientos asuman responsabilidades que nos les corresponden o, que en caso de asumirlas por vía delegada de las Comunidades o de la Administración General del Estado lo haga con la suficiente financiación, de modo que no se comprometa su situación económica.
Por otro lado, confían en que al PSOE le resulte oponerse a un paquerte de medidas que busca limitar el sueldo de los alcaldes o el número de asesores, aunque en caso de que no haya acuerdo global "se irá a pactos parciales" mientras que el conjunto de la reforma avanzará con o sin el apoyo de los socialistas.
