El sultán Saeed Al Manssori aprovechará un viaje privado para reunirse con su homólogo Luis de Guindos en la tarde de este sábado. El pasado 29 de mayo España y Emiratos Árabes Unidos (EAU) alcanzaron un acuerdo para fortalecer el comercio bilateral y fortalecer la cooperación estratégica en ámbitos económicos y empresariales. El comercio bilateral ha crecido un 75% en los últimos tres años, pero De Guindos cree que “hay margen” para incrementar las oportunidades de inversión. ‘Cash is king’ y los fondos –soberanos o no- siempre son bienvenidos.
Así que hace quince días ya se creo el consejo mixto empresarial entre la Confederación Española de Empresarios y la Federación de Cámaras de Comercio e Industria de EAU creada en 2011. ¿El objetivo? “Crear asociaciones público-privadas”. Es decir, lograr financiación árabe para servicios públicos españoles.
Pero más clave que eso es que España se convierta en plataforma para el desembarco de las inversiones de los fondos soberanos de EAU en Hispanoamérica. “Nuestro país puede servir como vía de acceso natural a los mercados europeos y latinoamericanos”, señalaba hace quince días el ministro de Economía español.
Y es que Hispanoamérica se ha convertido en el objeto de deseo de las economías con superávit y capacidad de ahorro. China ha encontrado en el Continente de la Esperanza capacidad de crecimiento y mercado de expansión, principalmente de la mano del eje Kirchner-Castro-Morales y ahora Maduro. Pero los fondos soberanos árabes tampoco quieren quedarse atrás. En el caso de EAU, los fondos Mudalaba y ADIA ya han comenzado su particular desembarco.
Las posibilidades son inmensas. Pero el choque cultural también. Por eso España trata de poner en valor nuestra capacidad de interlocución: hablamos el mismo idioma, llevamos décadas en el continente, acumulamos experiencia en las relaciones con gobiernos e instituciones y mantenemos una relación diplomática privilegiada por razones históricas y culturales. Además, controlamos sectores estratégicos como las finanzas, las telecomunicaciones y las infraestructuras, que suponen el tirón del resto de la economía. Así que el mensaje es claro: ‘si quieres hacer negocios en Hispanoamérica, mejor ve de la mano española’.
Perú ya ha intentado recientemente el ‘puenteo’ viajando a Dubai ofreciendo oportunidades de inversión por valor de 80.000 millones de euros. Así que la cita de este sábado entre el ministro de Economía español y su homólogo de EAU puede ser clave para afianzar nuestro país como plataforma indispensable hacia Europa y Latinoamérica.
