Eugenio Calabuig, presidente de Agva -Aguas de Valencia-, contrató a Iñaki Urdangarin en 2008 como asesor internacional, pero reconoce que su relación "no tenía sentido". Así lo explica el diario El Mundo, que recoge unas declaraciones de Calabuig en las que asegura que los proyectos del yerno del Rey eran "excesivos": "Me comentó la posibilidad de un trasvase entre el Mar Rojo y el Mar Muerto", declaró.
Otro de los proyectos del duque de Palma fue la negociación de la celebración en Valencia de unos Juegos Europeos por los que el gobierno valenciano pagó 382.203,70 euros y que nunca llegaron a celebrarse. El asunto quedó aparcado para siempre, pero los Juegos Europeos siguieron su marcha y se celebrarán finalmente en en la capitál de Azerbaiyán, Bakú.
Urdangarin fue contratado como asesor internacional por 375.000 euros que le abonaron en una cuenta en Suiza, según ha reconocido Calabuig ante el fiscal Pedro Horrach y el juez José Castro. Calabuig no sólo pagó sus servicios al duque de Palma a través de Suiza, también selló el acuerdo de colaboración con un supuesto testaferro del mismo, Robert Cockx, como representante de la firma Alternative General Services. El empresario asegura que "se fiaba" de Urdangarin: "Era el yerno del Rey, trabajaba en Telefónica, tenía relación con la Generalitat y pertenecía al Comité Olímpico".
El pago a Suiza puso a los investigadores tras la pista de las cuentas en el extranjero de Urdangarin, por lo que se demandaron tres comisiones rogatorias -Andorra, Luxemburgo y Suiza- ante la sospecha de un supuesto delito de evasión fiscal. Los resultados señalan que el socio de Urdangarin, Diego Torres, y su mujer, movieron dinero de Andorra a Luxemburgo, donde se ha detectado una cuenta con 900.000 euros.
