Los bancos han enviado al juez los extractos de los movimientos bancarios de las cuentas de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina. Los movimientos bancarios confirman la denuncia de la Agencia Tributaria de que los Duques de Palma desviaron fondos de Aizoon para pagar sus gastos personales. Pero esos movimientos destapan, sobre todo, qué nivel de gastos personales mantuvo durante años el matrimonio. La pareja gasta más de 10.000 euros al mes en colegios, club de tenis y facturas de luz y agua y la hija del Rey destina 288 euros a la semana a gastos de peluquería en Llongueras. Es ese tren de vida el que llevó a Iñaki Urdangarin y a su esposa a necesitar fondos adicionales que extrajeron de Aizoon, según Hacienda.
Los extractos bancarios remitidos al juez reflejan cómo la Infanta visita, por ejemplo, tres días a la semana la peluquería de Llongueras que factura los días 5, 6 y 7 de octubre de 2009 servicios por los que el salón factura más de 300 euros a la hija del Rey. Las cuentas reflejan que Llongueras emite cargos semanales o quincenales a la Infanta.
La factura de la zapatería
Los movimientos arrojan detalles de la vida íntima de la Infanta como su factura en zapatos. La hija del Rey gasta 247 euros en un par de zapatos de Jaime Mascaró el 26 de abril de 2010 y vuelve a comprar otro par del mismo diseñador por 890 euros el 1 de septiembre y otros 380 euros más un mes más tarde, el 10 de octubre del mismo año. Según los extractos bancarios, son 1.517 euros por tres pares de zapatos en seis meses. La factura de zapatos del matrimonio se redondea con más gastos para los niños: 381 euros en la famosa zapatería infantil Zapatos Jeromín ese mismo mes.
Las facturas de gastos personales se conocían hasta cierto punto porque el juez había reclamado los movimientos de la Visa Oro de la Infanta. Pero el tren de vida completo del matrimonio queda ahora al descubierto porque las entidades bancarias en que los Urdangarin tenían cuentas bancarias han enviado todas las operaciones al juez.
Gastos corrientes
El tren de vida del matrimonio Urdangarin explica que los Duques de Palma recurrieran a inyecciones de dinero de Aizoon ya que sus gastos corrientes superan con mucho los salarios que ambos declaraban al fisco. Así, por cuestiones como los colegios, luz, agua, etc. el matrimonio se enfrenta a más de 10.000 euros mensuales en gastos recurrentes.
- Liceo francés: La factura del colegio de los niños del matrimonio suma más de 5.100 euros al trimestre. El Lyceo francés factura a Iñaki Urdangarin y su esposa 1.407,20, 1.407,20, 1.296,30 y 1.066,80 euros por cada uno de sus hijos respectivamente. Antes de que llegaran al colegio, el matrimonio pagaba una factura de guardería de 565 euros mensuales.
- El club de tenis: Las actividades deportivas de la familia también cuestan al matrimonio casi 2.000 euros mensuales. En concreto, el club de tenis cobra 360 euros por adulto.
- La factura de la luz: Endesa cobra al matrimonio un recibo de la luz de 918 euros al mes en el año 2008 y de hasta 1.353 euros mensuales en 2010.
- Seguros: La póliza de seguros que el matrimonio mantiene con la compañía DKV supone un gasto de 3.038 euros anuales que se facturan a comienzos de año.
- IBI por el Palacete de Pedralbes: Igualmente, el palacete del matrimonio paga al Ayuntamiento de Barcelona un impuesto de bienes inmuebles de casi 5.500 euros que la pareja fraccionó en dos pagos de 2.644,76 euros efectuados en mayo y septiembre.
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Los extractos bancarios son relevantes no sólo por su partida de gastos sino, sobre todo, por la de los ingresos. Los movimientos en la cuenta de los Duques de Palma confirman las denuncias de Hacienda: Aizoon realiza transferencias periódicas para pagar las facturas personales del matrimonio. Así, tras efectuar los pagos de las gastos de las tarjetas de crédito en el mes de marzo de 2010, Aizoon realiza una transferencia a favor del matrimonio de 1.029 euros. Esa mecánica se repite periódicamente con entregas de 1.052 euros, unos movimientos que confirman la denuncia de Hacienda de que el matrimonio desvió fondos corporativos para pagar sus gastos personales.