La Jefatura Superior de Policía de Madrid ha realizado un segundo y definitivo informe sobre los hechos ocurridos el pasado sábado en torno a los dirigentes de Ciudadanos en la manifestación del orgullo. Según informan a Vozpópuli fuentes del Ministerio del Interior, este documento amplía y confirma el relato del anterior, publicado el martes por El País.
Fuentes del Departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska que han visto este documento informan que en él se explica cómo los dirigentes de la formación naranja rechazaron en varias ocasiones retirarse de la zona donde se estaban produciendo los momentos de tensión en los que fueron increpados por asistentes a la marcha. La Policía recoge lanzamiento de objetos, botellas de agua, líquidos y algún escupitajo, indican estas fuentes.
Sobre la autoría del documento, las fuentes consultadas se remiten a las palabras de este mismo jueves del ministro, quien lo ha atribuido en genérico a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, sin acotarlo a ninguna brigada en concreto. Las fuentes oficiales consultadas indican que para la confección del mismo han participado varias unidades intervinientes en el dispositivo.
Dudas dentro y fuera del Cuerpo
El primer documento no llevaba tampoco el membrete de ninguna unidad específica ni funcionario policial, lo que ha generado dudas dentro y fuera del Cuerpo al no ser la manera habitual de proceder. Su contenido y el redactado tampoco eran del todo ortodoxos, según admiten fuentes policiales a este periódico.
El relato de este segundo y definitivo documento indica que delante de la delegación de Ciudadanos marchaba en la manifestación un grupo de personas vestidas como si fuesen monjas que ralentizaban el paso de los políticos. En un momento dado, este grupo de personas optó directamente por sentarse en el suelo impidiendo continuar a la manifestación.
Distribuidos por la zona había una veintena de agentes de paisano de la Brigada Provincial de Información (BPI), que acudieron al lugar donde estaban los miembros del partido con su pancarta. Se les ofreció continuar por un lateral de la calle para poder seguir avanzando, pero el partido se negó, siempre según las mismas fuentes ministeriales consultadas.
La gente comenzó a congregarse en mayor cantidad, también a la espera del desfile de las carrozas. La tensión seguía latente y de nuevo los agentes de la Policía les ofrecieron continuar por el lateral y se negaron. Finalmente sí aceptaron salir del lugar y los antidisturbios de la Unidad de Intervención Policial (UIP) habilitaron un pasillo de seguridad para que salieran. El informe detalla que desde ahí se marcharon directos al Congreso de los Diputados para dar una rueda de prensa.