El catedrático de Ciencia Política de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y exmiembro de la Comisión de Control de la Ley de Consultas no refrendarias, órgano equivalente a una Junta Electoral, ha explicado que la ha abandonado ante la sospecha de que los pasos políticos hacia la consulta soberanista tienen "cierta escenificación y maniobra".
En declaraciones a Rac1 recogidas por Europa Press, Brugué ha expuesto: "Tengo indicios y una cierta sospecha de que estamos haciendo una cierta escenificación y maniobra, pero acabaremos haciendo una cosa diferente a la consulta".
El catedrático ha considerado que hay "dificultades legales, de funcionamiento, de mínimas garantías de neutralidad democráticas y unas estrategias que no ofrecen las garantías de que las cosas se están haciendo bien" de cara al 9 de noviembre.
Brugué ha lamentado que el acto en el que unos 800 alcaldes acudieron al Palau de la Generalitat para cerrar filas con la consulta, las instituciones públicas no han sido neutrales ya que han apostado claramente por el 'sí-sí' cuando se tendrían que haber limitado a pedir la consulta: "La institución tiene que garantizar una consulta presentablemente", ha considerado.
Además, ha criticado que la reunión de este viernes entre los partidos favorables a la consulta acabó con unas declaraciones apostando por el 9 de noviembre en las que "no se dice cómo se hará".
El catedrático ha considerado también que la suspensión por parte del Tribunal Constitucional del referendo soberanista "hubiera sido el momento de decir 'esto hay que pararlo y replantearlo'". En declaraciones a Onda Cero recogidas por Efe, Brugué ha justificado su decisión de abandonar la junta electoral en el hecho de que "las reglas tienen que estar muy claras y en este momento no lo están suficientemente".
Asimismo, Brugué ha lamentado el "linchamiento" que ha recibido en Twitter, lo que ha expresado a través de dos mensajes en su cuenta de la red social: "Lamento haberos decepcionado, pero también os quiero decir que puedo estar equivocado, pero tengo la conciencia bien limpia". "No puedo contestar a todo el mundo. Sólo decir, aunque muchos no me creen, que querría honestamente contribuir a la consulta. Pero no a cualquier precio", ha añadido.
Este catedrático de Ciencia Política de la universidad Autónoma de Barcelona, próximo a ICV, ha considerado que la aceptación por parte del TC del recurso presentado por el Gobierno contra la consulta "la hace imposible seguramente para el 9 de noviembre". Aunque, a su juicio, "el objetivo de votar debería mantenerse dentro de las soluciones", cree que con la decisión del TC de suspender de forma cautelar el referendo, "no se puede desarrollar las garantías que aseguran este momento electoral".
Ya se reunieron el sábado sin él
El abogado Benet Salellas, integrante de la comisión de control (junta electoral) de la consulta del 9N a propuesta de la CUP, ha confirmado este lunes que este órgano mantuvo su primera reunión el pasado sábado sin la presencia de Joaquim Brugué, que anoche anunció su renuncia por falta de garantías democráticas.
En declaraciones a Catalunya Ràdio, Salellas ha discrepado con Brugué, en cuya opinión no se cumplen las "garantías democráticas" para la celebración del 9N y ha confirmado que la comisión de control ya se reunió el pasado sábado para "cumplir con las funciones previstas en la ley de consultas", que, no obstante, está suspendida por el Tribunal Constitucional.
"Hemos intentado no frenar nada y que el proceso no quedara parado por cuestiones jurídico-formales", ha explicado Salellas, quien ha añadido que el organismo puede funcionar con seis miembros, a pesar de que cree necesario que el Parlament designe "en un periodo breve" al sustituto de Brugué.