El equipo conjunto de la Guardia Civil que investiga el asesinato de los guardias civiles en Barbate ha confirmado que la narcolancha de Kiko el Cabra no fue la que mató a sus dos compañeros el pasado mes de febrero, según el último informe al que ha tenido acceso Vozpópuli. Los seis detenidos por este homicidio se encuentran en prisión provisional por estos hechos y ahora el juzgado que se encarga de las diligencias tendrá que analizar su situación procesal.
Este nuevo informe certifica la conclusión que ya se temía el equipo creado por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Cádiz y por agentes de la Unidad Central Operativa UCO de la Guardia Civil. El documento, al que ha tenido acceso Vozpópuli, afirma que "en base a los elementos objetivos recabados en el punto actual de las pesquisas es posible concluir" que la narcolancha que "arremete en el puerto de Barbate hasta en seis ocasiones contra la patrullera oficial de la Guarida Civil NO es la narcolancha intervenida la mañana del 10 de febrero en la Playa La Hacienda de La Línea de la Concepción".
"Consecuentemente es posible descartar la participación de los actualmente investigados en la perpetración de los delitos de asesinato y atentado agravado objeto de las presentes pesquisas, sin que ello afecte a la presunta comisión de un delito de contrabando", señala el informe. Ahora queda por aclarar que pasará con los seis detenidos que se encuentran en prisión por el suceso de Barbate.
Análisis de los vídeos de Barbate
El equipo conjunto ha llegado a esta conclusión analizando y comparando los vídeos. Los investigadores utilizaron para ello las cámaras personales de los agentes, las grabaciones de los propios ocupantes de la narcolancha del cabra y la del Puerto de Barbate.
Otra de las claves para descartar la participación del Cabra y su embarcación ha sido el estudio de la misma ya que tenía dos antenas, algo raro incluso para los narcotraficantes. En los vídeos se puede percibir como los autores de la embestida mortal tenían una antena.
También se analizó las hélices de la embarcación dedicada al narcotráfico para ver si tenía pruebas. Los investigadores certificaron que no habían localizado restos de las prendas de los guardias civiles asesinados en las mismas.
Cuatro motores, una antena y tres ocupantes
El informe pone de relieve que como consecuencia de la sincronización de los diversos videos presentados se ha certificado que la narcolancha que mató a los guardias civiles tenía cuatro motores y una antena con un total de tres ocupantes. Es la encargada de acometer en seis ocasiones a los funcionarios.
El juez ha ordenado a los agentes investigar otras dos embarcaciones ilegales localizadas en los días posteriores al doble asesinato. Una de ellas en Chiclana y otra en otro punto diferente de la costa andaluza, según los documentos.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Barbate ya tiene el informe con las conclusiones del equipo liderado por la UCO. La providencia firmada por el juez Ángel Roja está firmada este mismo miércoles. Ahora el magistrado tendrá que decidir qué sucede con Kiko el Cabra y sus cinco compañeros que se encuentran en prisión desde febrero.
Desde el primer momento, los seis detenidos que se encuentran en prisión por el asesinato de Barbate defendieron su inocencia. Confirmaron que esa noche estaban en la zona en una narcolancha pero negaron ser los responsables del homicidio.
Los investigados señalan a un marroquí
Varios de ellos afirmaron ante la juez que instruye el caso que incluso llegaron a grabar vídeos que mandaron a sus familiares de como fueron testigos del homicidio. Mustafá C. afirmó en respuesta a la Fiscalía que conocía a los asesinos reales de los funcionarios que eran otros individuos de nacionalidad marroquí, según su declaración a la que ha tenido acceso Vozpópuli.
Un nuevo informe del caso Barbate ubica en la narcolancha del Cabra a un ciudadano marroquí que no fue detenido por los agentes. El Departamento de Biología del Servicio de Criminalista de Madrid de la Guardia Civil ha conseguido identificar a este sujeto gracias a dos colillas que se encontraron en la embarcación, según el documento al que ha tenido acceso Vozpópuli.
Sin embargo, la gran sorpresa de la investigación es que hay datos que reflejan que había más personas en la embarcación. Los funcionarios consiguieron sacar un perfil genético de otro varón obtenido gracias a los "restos orgánicos presentes en dos colillas de cigarro, halladas sobre la consola y la brújula" de la narcolancha.
Al cotejar los datos descubrieron que el perfil genético coincide con el de un marroquí llamado Mohamed Mrabel. Los agentes disponían de su ADN porque tiene antecedentes por un supuesto delito contra la salud pública que investigaba el Equipo de Policía Judicial de Jerez de la Frontera.
Los héroes caídos en acto de servicio en Barbate fueron David, agente del GAR, de 43 años, nacido en Barcelona, quien dejó mujer y dos hijos. El segundo es Miguel Ángel, agente del GEAS, de 39 años, natural de San Fernando (Cádiz), con pareja y una hija a su cargo.
Opaya
Quien molesta ahora a nuestro señor el Sultán para extraditar un súbdito tan bien empleado en su negocio más rentable.