El video de la agresión de una niña a otra en Villaverde (Madrid) se hizo viral en apenas unas horas. La grabación, que se difundió en redes sociales, mostraba una violencia desatada de una de ellas mientras los testigos en el parque jaleaban los puñetazos y patadas. Las dos protagonistas eran amigas pero tuvieron disputas y dejaron de hablar. Casi dos años después la justicia ha resuelto el caso mediático y ha impuesto una multa de 300 euros para la agresora y tres meses de tareas socioeducativas, en una sentencia a la que ha tenido acceso Vozpópuli.
El escenario del video viral fue el parque Palomares de Villaverde. Ocurrió el pasado 11 de septiembre de 2022 a las diez y media de la noche. Las dos menores adolescentes eran amigas pero durante ese verano separaron sus caminos por problemas ajenos a ellas de los grupos del barrio.
El detonante de la pelea se produjo cuatro días antes, según la denuncia de la víctima a los agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Villaverde. Esta chica entró en un directo de la aplicación de Instagram de la agresora. La adolescente le acusó de espiarla: "Te voy a arrancar el último mechón de pelo".
Crónica de una pelea anunciada
Las amenazas no solo se quedaron en esa frase. En los días posteriores había comunicado a sus amistades las intenciones que tenía: "Le voy a arrancar la cabeza cuando vuelva del pueblo", afirmaba en su círculo de confianza.
Este cúmulo de circunstancias tuvo su final en el parque de Palomares donde coincidieron. La agresora, sin mediar palabra, fue hacia la víctima y le propinó patadas y puñetazos hasta tirarla al suelo. "La agarró del pelo, la tiró al suelo y la golpeó", según la sentencia a la que ha tenido acceso Vozpópuli.
El trabajo de la Policía Nacional de Villaverde solo fue identificar a las dos menores y pasar toda la información a la Fiscalía de Menores. En este caso, no eran necesario practicar diligencias ya que el asunto parecía claro.
Los amigos grabaron la escena mientras jaleaban. El video se volvió viral y pocos días después la víctima decidió denunciar acompañada de su abogada Beatriz Uriarte. "Como consecuencia de la agresión, la víctima sufrió lesiones consistentes en dos hematomas a nivel frontal derecho con laceración asociada, hematoma a nivel parietal izquierdo, que precisaron de una primera asistencia sin posterior tratamiento, habiendo invertido en su curación cinco días, uno de los cuales estuvo impedido para sus ocupaciones habituales, curando sin defecto ni deformidad", según el parte médico.
La madre de la chica, acusada de un delito de lesiones leve, incluso llegó a pedir perdón a la familia de la víctima. Mostró su entendimiento de que denunciaran a su hija por la situación, que ellos habían incluso visto en redes sociales.
La sentencia del video viral
Las diligencias recayeron en el Juzgado de Menores número 6 de Madrid que ha resuelto la situación casi dos años después cuando la agresora ya ha cumplido los 17 años. El 18 de junio de 2024 se celebró una audiencia y la menor reconoció los hechos mostrando su conformidad con la medida solicitada por el Ministerio Fiscal.
La sentencia fue comunicada a las partes el 27 de junio después de la conformidad a la que llegaron las partes. La juez concluyó que la menor agresora era la autora responsable de un delito leve de lesiones. Por ello, se le impuso una multa de 300 euros y la medida de 3 meses de tareas socioeducativas, "con el contenido y fines que constan en esta resolución e informes técnicos emitidos".
Ese es el precio que tendrá que pagar la menor que protagonizó el video viral. Una práctica, la grabación de peleas, que cada vez está más extendida por redes sociales y los adolescentes no son conscientes, en muchas ocasiones, de la gravedad de los actos que llevan a cabo.
