Mariano Rajoy se mostró ‘satisfecho’ tras el acuerdo suscrito este domingo con Ciudadanos. “Tengo 170 diputados. ¿Quieres repetir elecciones?”, será el resumen de lo que piensa plantearle a Pedro Sánchez cuando se encuentren este lunes en el Congreso. Satisfecho se mostraba el presidente en funciones, pero sin aspavientos. Los 170 apoyos parlamentarios con los que acudirá a las votaciones del miércoles y viernes en el Congreso no son suficientes para su investidura. Así lo recordó con insistencia ante los medios. “Hemos hecho nuestro trabajo, ahora le toca a otros asumir sus responsabilidades”. Rajoy y Albert Rivera, fuego graneado sobre la cabeza del líder socialista que ya ha dejado muy claro que no permitirá un gobierno del Partido Popular.
Suman 150 medidas el documento suscrito entre el PP y Ciudadanos. “Cien de ellas son las que ya firmamos con el PSOE”, recordaba Rivera, orgulloso del empeño de su partido por desatascar una situación que no avizora salida alguna. "Es el mayor paquete reformista que se ha pactado en demcoracia", aseguraba el líder de la formación naranja. Génova pondrá toda la carne en el asador para que, a lo largo de esta semana, durante el debate y la votación de investidura, quede muy claro quién bloque la solución al este endiablado problema. “Sánchez no ha movido un dedo, está instalado en el ‘no’ y eso lo tienen que ver los españoles’ comentaba un miembro de su equipo.
El pesimismo es la tónica general ante el horizonte más próximo. Rajoy, que reconoce que ha tenido que hacer cesiones en el acuerdo con Ciudadanos, resultará derrotado con un respaldo en votos superior al que en su día alcanzaron, en convocatrias varias, Felipe González, Aznar o Zapatero y, sin embargo, pudieron gobernar. “Estamos a seis diputados u once abstenciones para la mayoría”, puntualizó el presidente en funciones. “Tenemos 52 escaños y 2,5 millones de votos más que el PSOE. Y ahora, hemos logrado acuerdo con dos fueras políticas, Ciudadanos y Coalición Canaria”, explicó. Las cosas han cambiado desde el 26-J. El PSOE, sin embargo, no es sensible a estos signos de mudanza.
Antes incluso que las vascas
Tanto, que se habla ya de una segunda investidura y hasta de terceras elecciones, un horizonte tenebroso que nadie logra despejar. Circulan ya versiones, como las que le han comentado al Monarca algunos visitantes en Zarzuela, como ha contaco Vozpópuli, de que mejor sería que PP y PSOE busquen nuevos candidato antes de volver a las urnas. Nadie en el PP ha pensado en tal posibilidad. Menos aún, Rajoy, que atajó cualquier especulación sobre el particular en forma muy tajante: “Volveré a intentar, desde luego, y a lo mejor no es necesario a que se sea después de las elecciones vascas”, declaró al ser preguntado por esta posibilidad.
La teoría de que con otro candidato el PSOE se avendría a modificar su rigidez y hasta en pensar en una abstención también se ha acelerado en las últimas jornadas. En Ferraz no se habla de eso. De momento tan sólo se busca derrotar a Rajoy esta semana, pese a sus 170 candidatos, y, de esta forma, debilitarle ante sus votantes y su propia militancia. No hay 'plan B', al menos en forma oficial. Sólo Sánchez lo sabe. Sus barones andan en la inopia, dando palos de ciego y más bien con la boca cerrada.
Será un debate de investidura muy duro por parte del líder socialista, que tiene que justificar algo que las encuestas consideran injustificable: que no sea capaz de asumir la caía en apoyos en las urnas que viene sufriendo su partido elección tras elección. Rajoy hará valer los pactos alcanzados con otros partidos, reivindicará su empeño por buscar una salida al ‘impasse’ y señalará como gran culpable a Sánchez y a sus barones, incapaces de asumir la gravedad de la situación por la que atraviesa España.