Otra consecuencia del fracaso de Eurovegas. El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha paralizado definitivamente su objetivo de llevar el tren desde Móstoles a Navalcarnero, una de sus promesas electorales de la anterior legislatura.
En realidad Eurovegas fue una disculpa para tener vivo ese proyecto que está parado hace muchos años y que ha supuesto unas importantes pérdidas para OHL, la empresa que se hizo con el concurso y explotación de la línea. Tampoco había seguridad en que el proyecto de Eurovegas pudiera revitalizar un proyecto que, según los técnicos, nunca debió iniciarse.
La propia presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, colocó en febrero del 2008 la primera piedra de una obra que se ha convertido en una pesadilla para el Gobierno regional, los ayuntamientos de Móstoles y Navalcarnero y, sobre todo, para OHL, la empresa de Villar Mir, con pérdidas millonarias.
Las obras, que estaban muy avanzadas en alguno de sus tramos, tenían un trazado de 14,6 kilómetros, y siete estaciones, cuatro de ellas soterradas.
Se iba a construir un viaducto sobre el río Guadarrama de 320 metros de longitud. Contaban con un presupuesto de 362 millones de euros para dar servicio a un tráfico que se pensaba sería de 20.000 personas diarias en sus inicios. Los cálculos actuales hablan de que sería utilizado por cuatro mil personas, lo que convierte su explotación en una ruina.
La Comunidad pretendía que diera servicio a la construcción de más de 5.000 viviendas previstas en Navalcarnero y que finalmente también se han paralizado para desgracia de los propietarios del suelo.
Se calcula que OHL ha gastado alrededor de 120 millones de euros antes de paralizar la construcción de este ferrocarril que en principio iba a ser con un tren propio de la Comunidad de Madrid pero que luego se acordó que se haría directamente con trenes de Cercanías para evitar transbordos y descoordinación. Ahora se espera que sea Fomento el que prolongue la línea C5, pero no hay dinero ni fechas.
Ahora está por ver cómo se solucionarán los problemas por el incumplimiento del contrato de concesión que hizo OHL en su día. Lo que se ha producido ha sido un incumplimiento de contrato por parte de OHL que no terminó el contrato de concesión a tiempo y abandonó la obra, lo que le podría acarrear sanciones millonarias. La Ley penaliza a las empresas que no cumplen con estos compromisos.
Sin embargo, la Comunidad de Madrid está por la negociación y dar una solución que pasa por la reposición de las aceras y las molestias que se han venido produciendo a los ciudadanos de Móstoles que han tenido muchos años las calles levantadas para unas obras inútiles. El Ayuntamiento de Móstoles ya ha repuesto estas vías tras conversaciones con la concesionaria de esta línea fantasma.
Este no es el primer fracaso del tren en la Comunidad de Madrid. La linea de Pinto a San Martín de la Vega está siendo desmantelada (incluso se quitan las vías) y el tren que iba a unir Chamartín con Torrejón está parado. El Plan de Cercanías que iba a suponer la revolución en el transporte de tren se pasea por el Boletín Oficial del Estado sin parar.