Los nuevos diputados se apelotonaban en los pasillos del Congreso. La M-30, que así se conoce coloquialmente a la estancia que rodea el hemiciclo, estaba llena como si de una manifestación se tratase, abarrotada de gente aún un poco confundida buscando la dirección correcta para entrar o salir. La teoría dice que tendrán cuatro años para acostumbrarse a las mullidas alfombras y aprenderse las rutas de la cámara como las oficinas en las que previamente trabajaron.
Eso, claro, los que alguna vez hayan pasado por oficinas. No es el caso de Rosana Pastor, pues es actriz y, por lo tanto, está más acostumbrada a la escena que a la mesa y el ordenador. La ganadora de un Goya es miembro independiente de Compromís-Podemos en el Congreso y comparte con su paisano Toni Cantó –ahora en Ciudadanos- una evolución poco común: de la escena a la política.
Belén Guerra toca el violonchelo, Anxo Fernán-Vello es escritor y Mae de la Concha librera
No son los únicos artistas del nuevo Congreso, pues Belén Guerra, miembro de Podemos y escaño por Madrid, tiene una larga carrera a sus espaldas como violonchelista. En una improvisada banda puede ser acompañada por Miguel Anxo Fernán-Vello, que cursó estudios en la materia aunque con el tiempo se convirtió en un muy premiado escritor en gallego. El lucense es uno de los miembros de En Marea en la cámara, por lo que es posible que pueda entenderse bien con Guerra. Marcelo Expósito, miembro de la mesa y de En Comú Podem, tiene una dilatada trayectoria como gestor cultural.
También escribe ocasionalmente poesía Sofía Castañón, que se dedicaba profesionalmente a la realización de audiovisuales antes de entrar en política por Podemos. Los libros de ambos pueden ser vendidos por Mae de la Concha, que tras una vida entera siendo secretaria de juzgado y de notaría se retiró para fundar una librería en Menorca. Ahora, en una nueva vuelta de tuerca a su biografía, ha cambiado La Torre de Papel, que así se llama su establecimiento, por un puesto en Podemos. En la escritura también está Marta Rivera de la Cruz (Ciudadanos) e incluso Raimundo Viejo (En Comú Podem), editor y traductor al catalán de La Democracia en América, la obra cumbre de Tocqueville.
Periodistas, cámaras, jueces y técnicos de Hacienda
Castañón controlaba la televisión desde las bambalinas del mismo modo que Noelia Vera lo hacía desde delante. Ella presentaba La Tuerka, el programa que fue el primer escalón en el ascenso a la fama de Pablo Iglesias. Ella, claro, es miembro de Podemos. También se dedicaba a lo audiovisual Miguel Vila, que es cámara y debió de ser de los menos confundidos en el primer día, no en vano había trabajado en ocasiones en el Congreso. De ahí pasó al sindicato y su paso a la política ha llegado en Podemos.
El difícil paso del periodismo a la política también se ve entre los nuevos diputados. Los casos más célebres son los de los miembros de Ciudadanos Juan Carlos Girauta y Marta Rivera de la Cruz, más conocida por su labor como escritora. Pero no son los únicos, Félix Alonso, de En Comú Podem, ha trabajado durante años en el periódico Catalunya Express. Y Segundo González, que cursó estudios en la materia aunque profesionalmente se ha encaminado al trabajo social.
González es de Podemos, un partido pleno de trabajadores sociales del mismo modo que Ciudadanos es un enjambre de abogados. Los jueces, sin embargo, se decantan por la formación morada, como es el caso de Victoria Rosell y Juan Pablo Yllanes, ambos fichajes estrellas para el equipo de Iglesias. Los altos funcionarios están bien representados en la formación naranja con el inspector de Hacienda Enrique de la Torre y el técnico del mismo ramo Vicente Ten.
En Podemos hay gran cantidad de profesores y trabajadores sociales; Ciudadanos es un enjambre de abogados
Es curiosa la incursión en el nuevo congreso de las fuerzas y cuerpos de seguridad, que habitualmente no tenían mucho interés por la política. El caso más obvio es el de Zaida Cantera, que ha encontrado acomodo entre el grupo socialista. También está Irene Rivera, que pilotaba el helicóptero de la DGT en Málaga antes de enamorarse del discurso de Albert Rivera y decidir cambiar de vida. Ejército, policía… y un guardia civil, Juan Antonio Delgado, de Podemos. Domingo Lorenzo, de Ciudadanos, fue comisario de policía.
Los nuevos diputados son más de ciencias que de letras, aunque Ciudadanos tiene dos arquitectos Melisa Rodríguez y Diego Clemente, que tuvo durante once años su propio estudio y tiene en su currículum el rediseño de tiendas de moda. Rodríguez, por su parte, tiene un largo perfil en LinkedIn en el que se nombra, entre muchas otras cosas, que fue monitora de campamento.
También hay una nutrida representación de la medicina, con gente como Amparo Botejara (Podemos), Carlos Pratch o Francisco Igea (ambos de Ciudadanos). Hay en la cámara también enfermeras como Marta Sibina. En la gestión de negocios sanitarios también está Sara Carreño, cuyo perfil en Infojobs cuenta que llevó la internacionalización de una clínica de fertilidad. En el ramo de las ciencias también están Jorge Luis Bail y Alberto Rodríguez, que son químicos. Rodríguez, trabajaba en una refinería antes de asombrar a Mariano Rajoy con sus rastas.
Camareros, deportistas y parados
María Tamara Raya, diputada por el PSOE, se financió los estudios de Administración de Empresas trabajando en un McDonalds, del mismo modo que Aina Vidal tiene en su carrera un montón de trabajos de camarera, entre otros en un bar llamado el Capitán Haddok, y ha sido teleoperadora. Hoy está en el Congreso por Podemos.
Las nuevas cámaras tienen, incluso, un entrenador de fútbol. Es Pablo Yañez, politólogo de Ciudadanos que tiene el título por la federación de Castilla y León y entrena a la Unión Deportiva Toresana. Su contacto con el deporte le acerca a Ana Surra, de ERC, que fue entrenadora de baloncesto y a su compañero de partido Rodrigo Gómez que es miembro del comité de disciplina y antidopaje de la Federación Española de Triatlón. A eso le suma su condición de abogado y empresario.
¿Y parados? También hay. Gabriel Rufián, cabeza de lista de ERC, lo era hasta su entrada en política y Enrique Bueno, de Ciudadanos, también tuvo que pasar por las listas del Inem después de que cerrase su empresa familiar.
Fidel Prieto y Luis Miguel Salvador hoy son miembros de Ciudadanos, pero en su día tuvieron responsabilidades en el PSOE
Hay también una gran presencia del mundillo universitario, especialmente en Podemos, un partido que parece creado en un laboratorio de politología de tantos como tiene entre sus filas. Y hay, por supuesto, políticos de toda la vida, esos jóvenes que soñaban con un escaño desde pequeños y ahora lo han visto cumplido. Casos de esos, muchos, desde Adriana Lastra a Marta Such o los miembros de Ciudadanos Fidel Prieto y Luis Miguel Salvador, que antes de vestir de naranja desempeñaron puestos en el PSOE. El segundo llegó incluso a ser senador.
Todos ellos añaden ahora una línea más al curriculum. Son representantes públicos, han sido elegidos para ser legisladores ¿por cuánto? Es difícil de saber.