La Policía Nacional ha dictado una orden de servicio que ha comunicado a todas las unidades en la que pide a los responsables de los cuerpos de seguridad que extremen las medidas de seguridad cuando entren en las comisarías "personas de tipología conocida que acudan a formular denuncias portando mochilas o vistan ropa no acorde con la estación del año".
Las instrucciones de los mandos policiales se deben al riesgo de "atentado inminente de carácter islamista" tras el ataque que se produjo hace unos días en Manchester (Inglaterra).
Piden que se tenga especial atención en lugares de ocio y aglomeraciones y añaden que deben extremarse las medidas de autoprotección en todas las intervenciones policiales.
Solicitan a los agentes la puesta en marcha de medidas de identificación selectiva de personas que puedan tener relación con islamistas radicales que porten mochilas, así como que conduzcan por zonas que reúnan a gran cantidad de personas. El motivo de estas instrucciones es que "podría producirse un atentado de tipo suicida o mediante ataque con vehículo contra la población civil", según señala la orden de servicio.
Los mandos recomiendan cerrar por la noche la puerta de entrada de la comisaría "estando vigilante para atender a los ciudadanos que acudan a las dependencias policiales". Asimismo aconsejan que se organicen servicios de contra vigilancia itinerante o estática.
Por otra parte, la Dirección Adjunta Operativa de la Policía ha dictado otra orden en la que se solicita a los cuerpos de seguridad que en los actos donde se produzcan gran acumulación de ciudadanos se mantengan las medidas de seguridad hasta la finalización del evento y el abandono de los asistentes del lugar donde se ha celebrado.