En un acto político en Sarriá junto al candidato del Partido Popular a las elecciones catalanas, Alejandro Fernández, Isabel Díaz Ayuso lanzó una advertencia contundente sobre las acciones futuras del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez. A menos de una semana para la celebración de las elecciones catalanas y un desayuno informativo en el Fórum Europa, la presidenta madrileña expresó su preocupación por lo que considera un posible "asalto" al poder judicial por parte del ejecutivo de Sánchez.
Durante su intervención, Ayuso no escatimó en críticas hacia la gestión del presidente Sánchez, a quien acusó de desmantelar el prestigio de su esposa, Begoña Gómez, con tal de obtener rédito político en las elecciones catalanas.
Además de abordar las preocupaciones sobre el gobierno central, Ayuso también dirigió sus críticas hacia los candidatos en las elecciones al parlamento de Cataluña. En particular, cuestionó la postura de Carles Puigdemont y Salvador Illa, a quienes acusó de ser "más separatistas, más liberticidas y más demagogos". Para Ayuso, la situación política en Cataluña refleja una división profunda y un aumento del nacionalismo, con posibles repercusiones negativas para la estabilidad del país en su conjunto. Su crítica se centró en la falta de soluciones concretas y en la promoción de agendas políticas divisivas, como la autodeterminación.
La defensa del constitucionalismo y las críticas a Illa
En contraposición a las posturas separatistas, Ayuso defendió la importancia del constitucionalismo y abogó por propuestas políticas sólidas y basadas en el respeto a la legalidad. Criticó duramente la gestión de Salvador Illa durante la crisis del COVID-19, calificándola como "calamitosa" y destacando su dependencia del gobierno central para tomar decisiones.
El discurso de Isabel Díaz Ayuso refleja un panorama político tenso y polarizado, caracterizado por tensiones entre el gobierno central y las comunidades autónomas, así como por la creciente fragmentación en el ámbito político catalán.