Íñigo Errejón tiene argumentos para participar en el debate entre los principales candidatos a la presidencia del Gobierno en las elecciones del 10 de noviembre. El debate electoral a cinco podría transformarse en un debate a seis si la plataforma electoral que lidera sabe jugar sus cartas.
El recurso de Errejón está en dos instrucciones de la Junta Electoral Central (JEC) que avalaron la presencia de Ciudadanos y Podemos en medios públicos y debates televisados en el 2015 pese a ser entonces fuerzas extraparlamentarias.
La primera resolución de la Junta permitió a los dos nuevos partidos tener un hueco en los planes de cobertura informativos de los medios públicos para las elecciones autonómicas de mayo del 2015. La segunda dio vía libre a un debate a cuatro en Atresmedia para las generales del 2015, en el que participaron la ex vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, Pedro Sánchez, Albert Rivera y Pablo Iglesias.
"Grupo político significativo"
La JEC consideró a Podemos y Ciudadanos como "grupos políticos significativos". Y para darles esta consideración dijo que habían obtenido al menos un 5% del voto en las últimas elecciones de ámbito nacional, que eran las europeas del 2014.
Errejón está en disposición de utilizar un argumento similar si quiere que su partido acceda a la cobertura informativa pública y al gran debate entre los aspirantes a La Moncloa. El candidato puede recurrir a las elecciones municipales del 26-M, que son de ámbito nacional.
La suma de Más Madrid, Compromís, Chunta Aragonesista (CHA), Equo y otras posibles confluencias está rozando el 5% de las papeletas en toda España. Las europeas, que también se celebraron el 26-M, no pueden tomarse como referencia porque la marca Más Madrid no se presentó.
El gran problema para Errejón, incluso alcanzando ese porcentaje del 5% de voto, es que su candidatura no es nacional. El candidato ha confirmado que no habrá listas de su movimiento en todas las circunscripciones. Es un hecho que le resta posibilidades en caso de que solicitase su participación en el debate. La Junta podría concluir que no es un "grupo político significativo", pese a que la vocación de su candidatura es claramente nacional.
Sánchez, sólo con Vox y en RTVE
Sin embargo, la JEC no autorizó la participación de Vox en los dos debates que se celebraron en la campaña para las elecciones del 28 de abril. La formación de Santiago Abascal había irrumpido con fuerza en Andalucía, pero no tenía otro baremo nacional en el que medir su apoyo. Y se les excluyó pese a presentar candidatos en toda España.
La campaña para el 10-N sólo durará una semana. Y el PSOE dejó entrever que Sánchez sólo participará en un debate a cinco. A la espera de otras ofertas de medios privados, todo indica que será en RTVE. La cadena pública hizo una polémica propuesta de varios debates, que se filtró antes incluso de que acabase la ronda de consultas del Rey.
Además del debate a cinco, la pública propuso dos cara a cara de Sánchez con Casado y de Sánchez con Iglesias. RTVE excluyó a Rivera de este formato sin dar una sola explicación. En su lugar, planteó un debate entre el líder de Ciudadanos y el del PP.