El 2024 pasará a la historia de España por ser el año en el que la mayor gota fría del siglo XXI arrasó con los municipios de la Huerta Sur de Valencia. Fue un 29 de octubre. A su paso, las lenguas de agua sepultaron cientos de vidas, miles de hogares, comercios, parques… El tsunami que descendió por la Rambla del Poyo cambió para siempre el paisaje y el paisanaje de esta tierra. La herida emocional será imposible de curar, la material tardará años en suturar.
Las lluvias torrenciales arrastraron también a la clase política dirigente a una crisis de reputación sin precedentes, con un Gobierno autonómico falto de reflejos, un Ejecutivo central impasible ante el drama y los líderes de los partidos enfrascados en la batalla de un relato expiatorio. Las consecuencias de la mala gestión de esta crisis todavía no han visto la luz. O sí, porque los primeros sondeos apuntan a un evidente desgaste para las formaciones implicadas. De repetirse elecciones en la comunidad, PP y PSOE se llevarían un severo castigo, mientras que Vox y Compromís alcanzarían sus mejores marcas.
El propio Alberto Núñez Feijóo, hace semanas, en una conversación informal con periodistas durante la comida navideña del PP, reconoció que su partido “está en la UCI” en esta región. El problema es que su diagnóstico no tiene fácil remedio. De hecho, hete aquí con la gran encrucijada que deberá resolver el líder de los populares en este 2025 que hoy comienza. El dilema se dirime entre “relanzar” a Carlos Mazón, cuestionado por su actuación antes, durante y después de la DANA, o dejarlo caer y encontrar un recambio que logre reflotar las siglas en un territorio clave para el PP. Las dos vías tienen sus pros y sus contras.
La primera se antoja enrevesada porque las explicaciones que ha ofrecido el barón valenciano hasta la fecha no terminan de convencer al personal. Cuando en noviembre compareció en las Cortes regionales, Feijóo anticipó que mucha gente se sentiría “parcialmente reconfortada”. No fue así. Las distintas versiones de la Generalitat sobre la polémica comida, que durante horas alejó al president del centro de control de emergencias en la jornada fatídica, su negativa a delegar el timón en el Gobierno o la tardanza en solicitar efectivos, representan una mácula que, a juicio de algunos populares, es ya indeleble.
No obstante, en la cúpula popular hay quienes piensan que cuando se lleve a cabo una investigación exhaustiva todo lo que sucedió y se repartan las culpas, Mazón saldrá mejor parado. Porque la tesis unánime en el PP es que la Generalitat pecó de bisoñez. Nada comparado con el Gobierno, que obró “de mala fe”.
"Entregar una pieza"
De ahí que la segunda vía tenga claroscuros. En el entorno de Feijóo se resisten a empujar a Mazón al cadalso, porque admiten que sería “entregar una pieza a Sánchez” cuando, en opinión del entorno del líder popular, “el que debería de irse a su casa por haber actuado en todo momento buscando el rédito político” es el presidente del Gobierno, no el de la Generalitat.
Lo que hay por delante ahora mismo es un compás de espera. Entre los mandos populares se ha impuesto una clarísima división sobre el futuro del presidente valenciano, que ligó su trayectoria a la reconstrucción de las zonas devastadas. Una cláusula de escape para justificar su hipotética salida más adelante.
Algunos dirigentes del PP apuestan por la carrera de Mazón: auguran que será capaz de resurgir de sus cenizas y que, en 2027, repetirá como candidato. Otros, sin embargo, no ven solución de continuidad posible y dan por sentada su salida.
Lo que queda claro es que la encrucijada se tendrá que resolver este año. En Génova son conscientes de que la Moncloa se antoja más lejana sin un buen resultado en la Comunidad Valenciana. Y el problema no se puede enquistar. Para primavera, en teoría, toca el Congreso regional, la cita clave. De momento, en Génova guardan silencio. Está todo en el aire.
A día de hoy, Feijóo mantiene un apoyo con reservas a Mazón. A juicio de la cúpula popular, “abrir ahora” el debate de la sucesión “sería una irresponsabilidad”. Apenas han pasado dos meses del temporal y sigue habiendo desaparecidos. Además, las citadas fuentes recuerdan a Vozpópuli que la DANA “ha pasado factura, sobre todo, en el cinturón rojo” de Valencia, uno de los puntos débiles del PP. Pero en el resto de provincias el partido mantiene la fortaleza. En buena medida, serán los sondeos los que determinen si Mazón resiste.
En sus últimas comparecencias públicas, Feijóo, Cuca Gamarra o Miguel Tellado, han cerrado filas con el presidente valenciano y han centrado toda su crítica en el Gobierno. Una vez inmersos en el capítulo de la recuperación, los populares ponen en la diana a Sánchez. La idea pasa por situar el foco sobre las ayudas, donde los populares interpretan que el PSOE sale mal parado, por la poca eficacia del Ejecutivo a la hora de tramitarlas. “Hemos pasado del ‘si necesitan recursos que los pidan’ a si necesitan ayudas que esperen”, denunció el pasado lunes el portavoz popular en el Congreso.
Triyuga
01/01/2025 07:03
El gallego este, nunca sabes si trabaja para el Psoe, o para el PP...
NormaDin
Sanchez, entrégate. El carrito del helao que te lo guarde Sacarino.
pangeat1
01/01/2025 12:06
Feijóo no se ha leído 'El Príncipe' ... atar su suerte a la de Mazón le costará las próximas elecciones (curiosamente fue Mazón quien las malogró para el PP el 23J de 2023 con su pacto prematuro con VOX). Feijóo no tiene más remedio que echar lastre y deshacerse de un cadáver político que apesta por indefendible.
chr18
01/01/2025 21:07
Maricomplejines, como siempre. Al que tienen que atacar en su débil línea de flotación es a Su Sanchidad Antonio Mentiras alias Berenjena.