El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha constatado este lunes que los resultados de las elecciones catalanas "desgraciadamente" no aportan estabilidad, por lo que ha reclamado "un gran acuerdo de generosidad y diálogo porque no hay otro camino que buscar fórmulas de convivencia real" ya que "el frentismo y el inmovilismo" no suponen una salida.
Puig, en una entrevista a la cadena Ser recogida por Europa Press, ha informado de que habló con el presidente de la Generalitat cesado, Carles Puigdemont, el día en el que el Parlament declaró la independencia para pedirle que convocara elecciones.
"Hubiera sido mejor y no se habría aplicado el 155 y, en definitiva, se hubiera evitado muchas de las tensiones que ha habido y que han sido absolutamente negativas para la convivencia, pero Puigdemont me comentó que no tenía suficientes garantías", ha señalado.
Espacios de diálogo
Puig ha comentado que la situación actual de Cataluña "viene de una generación de despropósitos porque la convocatoria de un referéndum ilegal fue un despropósito que no validan las elecciones de estos días". "La ilegalidad se ha cometido y tiene sus repercusiones pero hay que buscar espacios de diálogo y romper esta situación de incomunicación", ha reclamado.
En ese sentido, ha señalado que el Gobierno de España "debe comenzar a actuar de otra manera" porque, según los resultados, no parece que el camino elegido por el PP "haya sido el correcto".
Primarias
Por otra parte, ha reconocido que las primarias socialistas han servido para reposicionar el PSOE y ha explicado que apoyó a Susana Díaz porque "tuvo que ser leal con lo que pensaba" y porque creía que era "lo mejor para el PSPV". "Pero la democracia es aceptar resultados y minorías y mayorías deben saber gestionar esos resultados", ha apostillado.