Tras tres horas de declaración ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 31 de Madrid, el juez Antonio Serrano-Arnal ha dejado en libertad con medidas cautelares a Rodrigo Rato, imputado por fraude fiscal, blanqueo y corrupción entre particulares, consistentes en la retirada del pasaporte y la obligación de comparecer una vez al mes en su juzgado, según han informado fuentes jurídicas. Con estas medidas, el exministro de Economía solo podrá desplazarse por países de la Unión Europea.
Las medidas han sido acordadas a petición de la Fiscalía Anticorrupción que tras escuchar la versión que Rato ha dado del entramado societario en sede judicial, órgano al que no ha conseguido convencer el imputado con sus explicaciones de ahí que el Ministerio Público haya decidido finalmente solicitar las mismas al instructor. Tras ser interrogado se ha celebrado una 'vistilla' donde se han acordado las citadas medidas cautelares.
Rato continúa imputado por cinco delitos fiscales, blanqueo y corrupción entre particulares
Rato ha declarado ante el magistrado Antonio Serrano-Arnal durante aproximadamente tres horas, tras las cuales el instructor ha decidido imponer estas medidas cautelares, las mismas que ya acordó el pasado viernes para su secretaria, Teresa Arellano, y su gerente de confianza y presunto testaferro, Miguel Ángel Montero. Ambos quedaron en libertad tras pasar 48 horas detenidos en los calabozos de la Guardia Civil y prestar declaración ante el instructor.
Rato se salta un semáforo
El ex ministro de Aznar ha llegado a los juzgados de Madrid a las 8:30 horas y ha accedido a los mismos por la entrada que está situada en la calle Capitán Haya sin que ningún medio de comunicación haya podido captar esta imagen. Asimismo, Rodrigo Rato ha abandonado a las 14:45 horas los juzgados de Plaza de Castilla a toda velocidad sorteando a los periodistas que esta vez sí que le esperaban a su salida. El ex ministro se ha saltado un semáforo al abandonar la sede judicial.
La situación para el ex gerente del Fondo Monetario Internacional ha empeorado de forma ostensible en las últimas semanas después de que el juez imputara a algunas personas de su círculo más cercano como es su secretaria de toda la vida y persona de su máxima confianza, Teresa Arellano, así como al presunto testaferro Miguel Ángel Montero, relacionado con las sociedades Kradonara 2001 SL y la británica Vivaway Limited. Asimismo, Serrano-Arnal embargó el pasado 24 de septiembre a Rodrigo Rato sus bienes por valor de 18 millones de euros y la pensión vitalicia que percibía del Fondo Monetario Internacional.
Por otro lado, este miércoles y pasado mañana jueves, el titular Juzgado de Instrucción Número 31 tomará declaración a 16 testigos, ocho en cada una de las jornadas, por esta misma causa y ha ordenado el desprecintado y volcado de la documentación intervenida en los últimos registros practicados, que tendrá lugar la próxima semana en presencia de una comisión judicial y de agentes de las Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.