El rey Felipe VI criticó este domingo en Amán a los que han elegido la guerra por encima de la paz, "cambiando la vida de millones de civiles inocentes, acabando con vidas mientras redibujan fronteras y desplazan poblaciones: es inaceptable".
Así lo señaló durante la reunión durante el encuentro bilateral que, junto el rey jordano, Abdalá II, han mantenido las delegaciones de ambos países en el palacio de Al Husseiniya, en el que participó también el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares.
En el encuentro, Felipe VI indicó cómo el sábado, cuando inició su viaje oficial a Jordania, que aterrizó con "el corazón apesadumbrado" en este contexto tan difícil para Jordania y para todo Oriente Medio, y expresó su solidaridad y apoyo al papel crucial que desempeña este país en el fomento de la estabilidad regional.
España y Jordania, insistió el monarca, están unidas por un anhelo compartido de paz en la convicción de que "la única salida posible a este ciclo interminable de violencia pasa por dos Estados, Israel y Palestina, que vivan uno al lado del otro en paz y estabilidad".
Según recalcó el rey español, la monarquía hachemita ha desempeñado un papel "ejemplar y crucial". Y reconoció el liderazgo humanitario de Jordania y su "inmensa generosidad hacia las víctimas inocentes de los conflictos de la región".
Al igual que hizo el sábado en el primer acto a su llegada a Amán en el encuentro con representantes de la colectividad española, destacó el "incansable esfuerzo" de Jordania por llevar ayuda a quienes la necesitan, que España seguirá apoyando, así como la compasión con la que ha abierto sus puertas "a quienes huyen del flagelo de la guerra".
La reunión con el rey Abdalá tuvo lugar tras la visita que el rey realizó a primera hora de la mañana al campo de refugiados de la UNRWA en Ba'qa, en las afueras de Amán, donde comprobó, dijo, el trabajo de esta agencia de la ONU con la cooperación de la AECID: "no podemos más que admirar el compromiso de Jordania para hacer frente a una situación tan crítica y duradera", sostuvo.
Felipe VI, tras recordar las relaciones de amistad que unen a ambas casas reales, destacó cómo Jordania y España son también aliados clave en el proceso de construcción de un espacio mediterráneo.
También se refirió el rey español a la política interior de Jordania y destacó el "inmenso esfuerzo" que el país está haciendo para construir "un futuro mejor", encomiable en el "tumultuoso" contexto regional.
Las recientes elecciones de Jordania son para Felipe VI un testimonio "de la resiliencia de las instituciones jordanas y del inquebrantable espíritu de renovación que prevalece frente a la adversidad", una situación en la que el reino hachemita, garantizó, "siempre tendrá a España a su lado".
En este sentido, destacó que el firme compromiso de Abdalá con la reforma política y económica ya ha dado frutos importantes y ha colocado a Jordania en el camino de convertirse en una de las naciones con más visión de futuro de la región.
Una visión que comparte la UE, que ve ahora a Jordania como un socio estratégico, dijo Felipe VI, que recordó los proyectos importantes en los que ambos países colaboran, como su "lucha compartida contra el flagelo del terrorismo" que les reunió el año pasado en Córdoba (España)en el marco del Proceso de Aqaba.
Las infraestructura, la energía, la gestión del agua y las nuevas tecnologías son materias en las que pueden seguir colaborando, señaló el rey.