“Los españoles son, junto a los franceses y los alemanes, los se consideran entre ellos mismos, menos malgastadores, significando esto que afirman no gastar dinero sin pensar. Solo el 8% de los consumidores en España cree que gasta dinero sin pensar, un porcentaje 5 veces menor que en India donde el 41% cree que lo hace o como algunos países emergentes como China- con el 31% o Brasil con el 26%”. Según declara Rosana Valverde, de Kantar Media TGI, tras el estudio realizado por el Día Mundial del Ahorro.
EFPA (Asociación Europea de Asesores Financieros) en un estudio similar al anterior mencionado, publica que son los del País Vasco, La Rioja, Castilla León y Navarra, por este orden, los más ahorradores. La realidad es que la situación económica de España ha obligado a poner el foco de atención en la capacidad de la sociedad a la hora de elegir gastar o no dinero y en qué cosas lo hacen.
Francia y Alemania son los países más prudentes, con un 80% y un 73% de los consumidores respectivamente teniendo una cuenta de ahorro, comparado con el 61% de los británicos y el 57% de los españoles, según un estudio elaborado por Kantar. Nada comparable con China, donde el 87% de los consumidores poseen una cuenta de ahorro y galardonándose con el título de los más ahorradores del mundo. El extremo opuesto lo encontramos en Rusia, donde sólo el 12% de los adultos dicen tener una cuenta de este tipo.
Según nos declara Skyscanner, comparador de vuelos y hoteles, uno de los motivos por los que el consumidor se presta a ahorrar con mayor ahínco es para viajar. El 56% de los españoles aseguran ahorrar entre 500 y 1.500 euros para viajar, especialmente en vacaciones. Son capaces de prescindir de algunos otros caprichos, para poder llevar a cabo cualquier viaje.
Algunos de los mencionados caprichos a los que los viajeros son capaz de privarse son con un 40% la compra de moda y complementos, con un 21% salir a comer o cenar en restaurantes y con 14% las actividades de ocio y tiempo libre, como puede ser el cine o el teatro.
Precisamente dichos caprichos, son los más recurridos por la gente joven, salir a cenar o comprarse ropa ocupa más del 65% de sus gastos mensuales. Sin embargo, los jóvenes de entre 25 y 35 años son los que más conciencia de ahorro tienen. Tres de cada cuatro jóvenes destina parte de sus ingresos al ahorro, según el Barómetro de VidaCaixa realizado por Kantar TNS.
El principal motivo es asegurarse un buen futuro (80%) lo que se traduce en garantizar su jubilación o proporcionar estabilidad económica y protección financiera a sus hijos. Desean estar protegidos ante imprevistos (60%) pero no renuncian a disfrutar del presente. Las vacaciones y los viajes (40%) son el tercer motivo más veces aducido por los jóvenes para ahorrar.
De media, los jóvenes españoles ahorran 155 euros al mes, cantidad que representa un 17% de sus ingresos. Pero existen ciertas diferencias entre hombres y mujeres. Los hombres ahorran más, concretamente un 19%, reservan 168€ al mes frente a los 141€ al mes de las mujeres.
Uno de cada tres jóvenes ahorra de forma sistemática una cantidad fija al mes y casi la mitad lo hace de forma puntual, cuando puede y la cantidad que le sobra al final del mes. Sin embargo, la mayoría, el 61%, querría ahorrar más. También en este punto se detectan ciertas diferencias entre sexos. Entre las mujeres, este porcentaje es incluso mayor y alcanza el 66%. Por el contrario, el 43% de los hombres asegura que ahorra justamente lo que desea ahorrar.
El millennial ahorrador es un joven que tiene 22 años cuando empieza a ahorrar, trabaja (78%), vive en una gran ciudad, en pareja y/o con hijos (58%), colabora en la economía familiar (25%) y tiene entre uno y dos productos financieros de ahorro.
Las expectativas respecto a la acción de ahorrar son muy positivas en España. El 43% de los que hoy ahorran, esperan ahorrar más en el futuro ya que cree que tendrá más ingresos (46%), mejor trabajo (18%) y menos gastos (11%). La otra mitad, no tiene tan buenas expectativas de mejorar su capacidad de ahorro cuando cumpla los 40. Un 35% cree que ahorrará lo mismo y un 22% considera que ahorrará menos.