El fabricante alemán de automóviles de lujo BMW ha llamado a revisión a un total de 2.000 todoterrenos de su modelo X5 exportados al país asiático debido a defectos relacionados con sus frenos, anunció este jueves la Administración General de Supervisión de la Calidad, Inspección y Cuarentena.
La revisión afectará a los modelos vendidos en China entre 2007 y 2010 con motores V-8, y que fueron producidos entre el 9 de mayo de 2006 y el 18 de marzo de 2010, precisó el citado organismo, según recoge la agencia oficial Xinhua.
La filial de BMW en el gigante asiático contactará a los conductores afectados para reemplazar los componentes defectuosos de manera gratuita, en un periodo de tiempo no especificado.
El defecto detectado implica que el impulsor de los frenos de los vehículos afectados puede llegar a verse deteriorado por posibles fugas de aceite lubricante de sus bombas de vacío, lo que, de ocurrir, podría provocar que el sistema auxiliar de los frenos no funcione bien, e incluso desencadenar un problema de seguridad.
Similar al año pasado
El año pasado BWM pasó por una situación similar con 120.246 automóviles de sus series BMW 5 y BMW 6, en ese caso por posibles problemas en una cobertura defectuosa de los cables del sistema de la batería, y otros 3.406 coches de importación, del modelo Mini Cooper, por un fallo en su refrigeración del sistema electrónico.
El pasado 1 de enero entraron en vigor en China nuevas normas de control de la calidad de los vehículos más estrictas que hasta la fecha.
La nueva normativa permite a las autoridades chinas multar e investigar a los fabricantes de automóviles en el país que, en caso de detectarse defectos en sus vehículos, no los retiren del mercado para corregir el problema con la rapidez necesaria.
En 2012 hubo en total 113 casos de retiradas eventuales de vehículos en toda China, lo que implicó a cerca de 3,2 millones de modelos defectuosos, un 75 por ciento más que lo detectado en 201