Cuanto más se acentúa la caída de la demanda de coches eléctricos, más afloran los temores de la industria automovilística ante la amenaza de multas millonarias por parte de la Comisión Europea. Y es que son muchos los fabricantes que han alertado del riesgo que supone para la industria y el empleo en el sector las multas a los fabricantes por no cumplir los objetivos de emisiones si la demanda sigue sin responder de la manera que tiene que hacerlo a la oferta de automóviles eléctricos de las marcas.
En una mesa redonda de un acto sobre el futuro de la automoción organizado por la Sociedad Barcelonesa de Estudios Económicos y Sociales (SBEES) de la patronal catalana Foment del Treball, la presidenta de Faconauto, Marta Blázquez, ha criticado que la Comisión Europea ponga objetivos medioambientales y multas al sector de la automoción por no cumplirlos, pero no un plan para cumplirlos.
La responsable de la patronal de concesionarios oficiales ha añadido que el que la caída que está sufriendo la demanda de coches eléctricos va a acarrear multas millonarias a los fabricantes por no reducir la media de emisiones de los vehículos vendidos.
Según Blázquez, estas sanciones van a lastrar las inversiones de los fabricantes de automóviles y con ello se pondrá en riesgo el empleo, por lo cual ha pedido a la CE que elimine las multas mientras decide qué hace con los objetivos de emisiones.
La secretaria general y directora de Estrategia Corporativa y Sostenibilidad de Seat, Natalia Turón, ha señalado que la mayor preocupación de la firma es llenar sus fábricas de vehículos y quieren producir eléctricos, pero si no hay suficiente demanda y tienen que enfrentar las multas que les fijan, se verán obligados a reducir la producción de vehículos de combustión, y eso afectará al empleo.
Más apoyo
Ha reclamado un apoyo general a la tecnología eléctrica y ha añadido que necesitan mucho soporte y apoyo de las instituciones, sobre todo gubernamental.
Por su parte, el director general de la patronal de fabricantes de automóviles, Anfac, José López Tafall, ha afirmado que actualmente hay oferta más que suficiente de vehículos eléctricos, así como de puntos de recarga para el parque que hay, pero no se venden suficientes, y "lo peor que puede pasar es una descompensación de la oferta y la demanda", sobre todo cuando a la oferta se le ha hecho hacer importantes inversiones.
El director de Relaciones Institucionales de Ford en España, Fernando Acebrón, ha dicho que la marca ha necesitado hacer "ajustes" en el plan de electrificación que tenía porque no tiene la demanda que esperaba y ha añadido que "sin demanda, no tiene sentido seguir desarrollando oferta".
No obstante, ha dicho que Ford tiene comprometidas importantes inversiones para transformar sus fábricas en Europa, incluida España, para fabricar coches eléctricos o altamente electrificados.
Una caída generalizada de la demanda de coches eléctricos que llega en pleno desembarco de los fabricantes chinos, una competencia frente a los productor europeos que comenzó hace apenas cuatro años, y que ha pasado de representar en 2021 apenas un 0,2% de cuota de mercado por parte de las marcas chinas a un 6% en la actualidad.
El director general de la asociación de proveedores de automoción Sernauto, José Portilla, ha señalado que la idea de los fabricantes chinos es instalarse en un futuro próximo en Europa, pero hasta que eso se produzca, dos, tres o cuatro años, cree que la UE tiene que ganar en autonomía estrategia directa y anclar componentes críticos, para que no ocurra como pasó con la escasez de semiconductores.
Ha señalado que en ese aspecto se requieren inversiones inabordables y ha apuntado que muchos fabricantes chinos cuentan con subvenciones para buena parte de la cadena de valor del automóvil y, a su juicio, cuenco se instalen en Europa, donde no existen esas subvenciones, pedirán costes competitivos.