Los servicios de rescate han hallado a primera hora de la tarde de este martes el cuerpo del varón desaparecido en la jornada del lunes en un pozo excavado por él mismo en busca de un tesoro en Valderrey (Zamora), a las afueras de la capital.
Año y medio llevaba con un compañero buscando un posible tesoro de asentamientos anteriores. A primera hora de la tarde del lunes acudían efectivos de la Policía Nacional, tras la denuncia de su amigo, que se había acercado a la zona y había descubierto enseres del desaparecido y su móvil en las cercanías, "además de escuchar leves quejidos", según ha explicado el subdelegado del Gobierno en Zamora, Jerónimo García Bermejo, quien se ha interesado este martes por los trabajos de auxilio que se siguen realizando en la zona.
Según la información policial, se trataría de un varón de origen marroquí, del que no pueden precisar su edad. Era pastor de una finca cercana a la zona donde, junto con su amigo, también pastor, se llevaba dedicando desde hacía más de año y medio a realizar profundos pozos en busca de esa recompensa que ellos suponían que escondían esas tierras. Antes, el desaparecido había realizado diferentes catas, según han señalado fuentes policiales.
Pesimismo
Aunque el cuerpo todavía no ha sido recuperado, es más que probable que esté sin vida, ya que, según han asegurado los bomberos, en la profundidad en la que seguramente se encuentra, el nivel de oxígeno es tan solo del 18%. "Esto habrá provocado que, junto con los componentes sulfurados que también existen bajo tierra, le haya provocado una narcotización y una pérdida de consciencia, terminando en una muerte dulce, sin sufrimiento", ha explicado Bermejo.
Los efectivos del cuerpo de Bomberos de Zamora calculan que todavía tardarán al menos tres de horas en localizar el cuerpo. Tras alcanzar los diez metros, ahora los trabajos de excavación se complican, puesto que el pozo, con una anchura de tan solo 60 centímetros, ya tiene roca a esa profundidad.
Los trabajos se están realizando a través de excavadora, puesto que es muy peligroso que cualquier persona se acerque, por peligro de derrumbes. Desde la Policía Nacional se ha descartado de que se conocieran estos trabajos de excavación por parte de la pareja, que han sido calificados de "desconcertantes e inauditos" y se ha considerado que todos estos meses de buscar el posible tesoro ha sido una "imprudencia" por parte de los autores.