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El taxi volador ya está aquí: se inician las pruebas

El taxi volador ha realizado estos días una prueba en Versalles, lo que indica que su implementación cada vez está más cerca

El taxi volador, cada vez más cerca de ser una realidad. EFE

El taxi volador desarrollado por la compañía alemana Volocopter realizó este domingo un vuelo experimental en los jardines del Palacio de Versalles después de que las autoridades aeronáuticas hubieran negado la certificación para que eso se hiciera en París durante los Juegos Olímpicos.

El vuelo comenzó en una plataforma que se creó expresamente y se desarrolló por encima de los jardines del Grand Trianon y del Palacio de Versalles, explicó en un comunicado Aeropuertos de París (ADP), la compañía pública que explota las tres grandes plataformas aeroportuarias de la capital francesa.

Plano cenital de cómo se vería un taxi volador.

ADP, que estaba asociada en esta operación con Volocopter y el Palacio de Versalles, destacó que se demuestra que esta aeronave se puede utilizar en entornos protegidos o sensibles, en particular en misiones de evacuación sanitaria.

Otoño, la fecha clave para el taxi volador

Igualmente, destacarían que las experimentaciones continuarán en otoño en otras plataformas realizadas por la concesionaria de los aeropuertos.

A ese respecto, los socios mantienen la voluntad de que eso incluya antes de fines de año la que se había preparado cerca de la estación de tren de Austerlitz de París, que no se ha podido utilizar por falta de permisos.

En concreto, la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) no dio la certificación porque se detectaron vibraciones en el motor y se pidió al fabricante estadounidense que realizara modificaciones antes de continuar con el proceso de autorización.

La celebración de los Juegos Olímpicos impidieron la realización de algunas pruebas

Según apunta EFE, el Gobierno francés había dado en julio su autorización para que se llevaran a cabo vuelos experimentales (no comerciales) durante los Juegos de París, condicionada a la de la EASA.

El Ayuntamiento de París, por su parte, era abiertamente hostil al proyecto de hacerlo volar durante los JJ. OO., con el argumento de que permitirá sólo a personas con mucho poder adquisitivo esquivar los problemas de los transportes terrestres en espacios urbanos muy saturados.

El Volocity tiene en su versión actual dos plazas (una de ellas para el piloto) y está equipado con baterías eléctricas que alimentan los 18 rotores con los que puede despegar y aterrizar verticalmente. Habrá que esperar para ver qué otras mejoras desarrollan y cuál será la fecha de implementación.

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