Después de seis años de sequía, Ray Loriga, el escritor de cejas furiosas, mirada presidiaria y novelas fulminantes, vuelve con una nueva historia. Se trata de Za Za, Emperador de Ibiza (Alfaguara, 2014), su más reciente obra de ficción tras la publicación en 1998 de Ya solo habla de amor.
Entre medias, el que fuera considerado por muchos el representante más destacado de la generación literaria española que irrumpió en los noventa, publicó el libro de relatos Los oficiales y El destino de Cordelia (El Aleph, 2009), el ensayo Sombrero y Mississippi (El Aleph, 2010) y la novela juvenil El bebedor de lágrimas (Alfaguara, 2012), esta última considerada por muchos como un tropiezo en la obra del madrileño.
En Za Za, Emperador de Ibiza, el autor de Trífero (Destino, 2000) se adentra en la comedia. En sus páginas, Loriga narra la historia de Za Za, futuro emperador de Ibiza. Za Za es el nombre de una poderosa droga que proporciona risa, euforia, felicidad y no provoca ningún tipo de resaca.
Za Za es también un antiguo 'dealer' de poca monta y escasa ambición que vive retirado en Ibiza y dedica sus días a leer prensa deportiva y pasear tranquilamente por la isla. Su vida cambiará tras un gigantesco malentendido que le confunde con el creador de esta droga perfecta y le convierte en el centro de las disputas de las principales mafias que se enfrentan por gobernar su distribución.
Según describen sus editores, "Za Za es un personaje único que parece rescatado de alguna película de los hermanos Coen o de alguna novela de Jim Thompson o Kurt Vonnegut" y con el que Loriga da forma a una comedia "irreverente" que cuestiona las expectativas y anhelos de la sociedad actual.
