De vez en cuando te sale una espinilla en la frente, en la barbilla, en la nariz o en el moflete que se convierte en una pesadilla. La miras, la tocas, sientes que te duele y por unos segundos piensas en no explotarla pero sin darte cuenta te encuentras en una situación en la que te has hecho un completo desastre.
Además, desde que comenzara la pandemia provocada por la covid-19, tocarse la cara es todavía peor. Recuerda que las autoridades sanitarias han recomendado tener cuidado con no rozarnos la nariz, los ojos y la boca para evitar más contagios. A partir de ahora, ponle un poco más de consciencia.
No entiendes muy bien que con tu edad, porque ya no tienes quince años, te haya salido un grano como ese, pero lo cierto es que no es nada raro que de vez en cuando aparezcan en nuestro rostro este tipo de protuberancias que tanto molestan y que suelen estar relacionadas con problemas hormonales o de alimentación. Y lo cierto es que es una patología que puede aparecer y desaparecer a lo largo de nuestra vida dependiendo también de la edad y de algunos hábitos.
Por qué no quitar espinillas
Lo primero que debes tener en cuenta es que si no es un problema aislado y eres una persona con acné desde hace años debes ir al dermatólogo a que ponga un tratamiento adecuado. Además, dependiendo del tipo de espinilla que te haya salido, quitarla puede provocar un peligro mayor.
¿Por qué no es sano que te revientes un grano? A pesar de resultar definitivo hay muchas probabilidades de que te provoques una herida e infectes la zona al romper la barrera cutánea de tu piel, ya que al manipularlo dejas que entren más bacterias . Sabemos perfectamente que es muy desagradable tenerlos (y más en la cara) y dan ganas de acudir al espejo inmediatamente, pero debes controlarte porque no se pueden quitar así como así.
Es muy posible que si explotas una espinilla y te provocas una infección te acabes dejando una marca en la cara de la que luego vas a arrepentirte para siempre. Antes de hacerlo piensa bien en las consecuencias, cuenta hasta diez y aguanta. A todo el mundo le salen granos y no es un drama.
Debes tener especial cuidado con los pelos encarnados, los puntos negros y el herpes labial. No toques ninguno de ellos o puedes lograr que aumente la inflamación y que tu cara no se recupere en varias semanas. Piensa que tus granos se forman con los aceites naturales de tu piel cuando se quedan bajo una fina capa de la misma, así que si no quieres provocar algo más grave ten cuidado.
Qué hacer para que desaparezca el grano
Para eliminar las acumulaciones de bacterias y el exceso aceites naturales de nuestra cara implica comprometerse a una limpieza en profundidad durante el día y la noche. Aunque cada piel es diferente y puede necesitar un tratamiento distinto, muchos dermatólogos sugieren utilizar productos no comedogénicos, un término que se refiere a los ingredientes que obstruyen los poros y producen imperfecciones y que tienen algunos aceites minerales o sintéticos e incluso productos naturales como la cera de abejas o el aceite de germen de trigo.
Cuida mucho las cosas que comes, ya que los productos lácteos, los que contienen muchos azúcares procesados y la comida basura pueden provocar acné. Procura no estar muy estresado haciendo ejercicio: el deporte es muy bueno para este tipo de problemas en la piel, siempre y cuando después cuides tu higiene. Además, lávate la cara dos veces al día con jabón neutro para eliminar impurezas
Forunculofilia
Quitarse espinillas o simplemente el hecho de tocarse la cara puede estar provocado por un sentimiento de ansiedad. De hecho, muchas personas que tienen depresión o algún tipo de emociones negativas acaban desarrollando esta manía. Pero no solo eso, en algunos casos se llega a convertir en una obsesión.
Las ganas casi incontenibles de explotar puntos negros cada vez que estás frente a un espejo o cada vez a alguien que tenga una espinilla se llama forunculofilia. Si eres de los que no puedes esperar ni un segundo para quitarlos y además disfrutas viendo vídeos de profesionales y dermatólogos, lo cierto es que sufres esta pasión por los granos.
No te preocupes, no estas solo. Desde que las redes sociales forman tanta parte de nuestra vida miles de personan buscan vídeos en el que ven cómo sacan estas asquerosas protuberancias. ¿Sabes por qué pasa? Al verlo estás generando endorfinas, las hormonas culpables de la felicidad. Y es que ese placer que notas cuando explota se debe a que tu mente lo asocia como recompensa al esfuerzo de quien lo ha estrujado.