La salud del sueño cada vez es peor entre la población. El estrés, la tecnología y la exposición continua a pantallas digitales hace que muchas personas sufran problemas para conseguir una buena calidad del sueño. Seguro que te ha ocurrido que te levantas en la madrugada, te desvelas y ya no puedes volver a dormirte. Cuando esto pasa de forma frecuente, hablamos del llamado "insomnio de mantenimiento". Un tipo de insomnio que nada tiene que ver con el más extendido que es el insomnio de inicio, por el cual las personas tienen problemas para "coger el sueño" como se suele decir.
Lo que causa el insomnio de mantenimiento
Las razones principales de este tipo de insomnio son el estrés y la ansiedad, y sobre todo, aparecen cuando las personas atraviesan etapas donde se acumulan las preocupaciones. En declaraciones a eldiario.es, el doctor experto en neurología García-Borreguero y director del Instituto del Sueño comenta que a las 3.30 de la madrugada tiende a activarse "algo" en nuestro cerebro: "En situaciones en las que por motivos de estrés haya habido ya una mayor actividad diurna, puede provocar un sueño de menor profundidad, o bien un mayor número de despertares, o directamente un despertar precoz".
Cómo luchar contra el insomnio de mantenimiento
Según comenta el experto, es importante que no nos pueda la "obsesión". Empeñarnos a ir a dormir puede producir el efecto contrario. En los casos en los que "pillar" el sueño se pone complicado, es mejor salir de la cama, andar por casa, ponerse a leer o realizar alguna pequeña actividad, para posteriormente volver a la cama.
El especialista también aporta un nuevo truco para luchar contra los molestos despertares de media noche. La solución es poner el despertador una hora antes. "Le estamos dando al cerebro algo menos de tiempo para permanecer dormido. Esto va a llevar en los días siguientes a un mecanismo compensatorio. El déficit de sueño que se produce va a ser compensado con un sueño más profundo y más continuado", termina.
Por supuesto, estar con el móvil en el sofá después de cenar no ayuda a la hora de conciliar el sueño, ya que hace creer al cerebro que es de día. En este momento del día lo ideal que es las luces sean más tenues como anaranjadas. Una opción ideal en este caso son las conocidas lámparas de sal del himalaya, que al producir iones negativos ayudan a provocar un estado de relajación que incita al sueño.