Que el sector inmobiliario ha sufrido una enorme transformación en los últimos años es algo que muy pocos pueden negar. La crisis del ladrillo, la irrupción de las nuevas tecnologías y los cambios sociales que han experimentado los compradores de viviendas han tenido como resultado una nueva forma de comprender la industria inmobiliaria en la que el diseño se ha convertido en un factor clave para atraer al cliente y en una nueva fuente de renovación para todo el sector.
Así se ha desprendido de la jornada organizada por Vozpópuli sobre el rol que juega el diseño en la promoción inmobiliaria, que ha reunido a varios expertos de diferentes ámbitos del proceso, desde la construcción, hasta la arquitectura o el real estate.
Juan Antonio Carrero Callejas, director de Negocio Inmobiliario en Avintia Inmobiliaria, ha dado el pistoletazo de salida al evento poniendo de relieve cómo han cambiado las tendencias de la demanda de vivienda. “Creo que todos los actores del sector, tanto los promotores, como la banca, hemos aprendido de los errores del pasado”, ha apuntado.
Se está apostando por el sector, un sector que tiende a que seamos mucho más exigentes porque el público, el consumidor, así lo demanda a todos los que participamos en el proceso
A su modo de ver, a pesar de que las barreras de entrada en el sector han aumentado, la apuesta por la industria inmobiliaria continúa. “Sí que se está apostando por el sector, un sector que tiende a que seamos mucho más exigentes porque el público, el consumidor, así lo demanda a todos los que participamos en el proceso”, ha señalado.
“Hay que ser rompedor”
Sebastián Machado, socio director de MANO Arquitectura, también ha notado esa exigencia por parte de sus clientes, una transformación que afronta con optimismo como arquitecto. “Se nota la diferencia con otras épocas, hay una exigencia por ser rompedor y hay que entender cuáles son las necesidades, qué es lo busca el cliente”, apunta.
La tendencia antes era hablar en metros cuadrados, ahora hay que preguntarse cómo son esos metros cuadrados, porque si son buenos son más importantes que la cantidad de metros
Tal y como expone, desde el punto de vista arquitectónico, el construir ya no se limita a “edificar”, sino que constituye todo un proceso donde el diseño conforma una parte esencial y que permite explorar nuevas formas de construcción, como proyectos en los que se tiene en cuenta la integración del paisaje. “La tendencia antes era hablar en metros cuadrados, ahora hay que preguntarse cómo son esos metros cuadrados, porque si son buenos son más importantes que la cantidad de metros”, concluye.
Un cambio de actitud por parte de los consumidores que para poder afrontarlo, según Mabel Madrigal, miembro de la Junta Directiva de WIRES (Women In Real Estate Spain) y Senior Asset Manager en Mela Real Estate, es necesario poner el foco en el diseño del producto.
Cambio en las necesidades del consumidor
“Lo que está claro es que se ha producido un cambio en las necesidades del consumidor, tanto a nivel de alquiler como de propietario, por lo que el diseño de las promociones tiene que responder a esas necesidades e inquietudes sin perder la rentabilidad”, ha afirmado.
Desde su punto de vista, a pesar de la inestabilidad experimentada en el pasado, el producto inmobiliario continúa siendo un activo financiero “muy interesante” que sigue suscitando interés, sobre todo fuera de nuestras fronteras.
Según ha explicado Madrigal, Mela Real Estate nació con el objetivo de dar respuesta a la falta de un producto financiero donde invertir por parte del capital extranjero, que supone un 61% de la inversión en inmobiliario, seguido de las socimis y de los inversores nacionales. No obstante, cada vez son más los clientes que demandan productos flexibles, alejados del concepto de “llaves en mano”, como ocurría hace 10 años.
A ojos de José Ignacio Esteban, director general de Avintia Industrial, no sólo han cambiado los consumidores y los inversores, sino que el sector inmobiliario también se ha “profesionalizado”, sobre todo en el ámbito de la promoción.
Irrupción de las nuevas tecnologías
A su modo de ver, lo necesario para garantizar que el sector de la construcción se mantenga estable es “la disciplina”. “Es necesaria por parte de todos los actores que participamos en el sector de la construcción, que antes parecía que era todo barra libre. Así conseguiremos hacer estable este negocio, que no esté sujeto a ciclos, porque la necesidad de vivienda no es cíclica, es una necesidad que ha existido siempre y es continua”, ha apuntado.
Además de profesionalidad y disciplina, los ponentes han vuelto a destacar lo fundamental que es apostar por el diseño y la flexibilidad del producto, tal y como comentaba Madrigal. Esteban, de hecho, es el impulsor de Viom System, sistema de construcción industrializada de Grupo Avintia siguiendo un modelo 2D que permite total flexibilidad para el proyecto arquitectónico y diseño de acabados.
Se busca la personalización de espacios, la flexibilidad del producto. Hace años era impensable que alguien se pudiera comprar una casa a través de una aplicación y míranos ahora
Un producto que, al igual que la aplicación de Avintia Inmobiliaria que permite al cliente modelar vía ‘online’ cómo quiere que sea su casa, surge a raíz de otros de los puntos del debate: ¿El diseño responde al cambio de la demanda o, por el contrario, han sido las nuevas tendencias estéticas las que han desencadenado una transformación de lo que buscan los clientes en la industria inmobiliaria?
Para Carrero, el cambio de demanda corresponde a un cambio social, tal y como exponía Madrigal. Una transformación de la sociedad dónde no sólo han variado los modelos de familia, sino que la tecnología ha modificado de manera radical las formas de vida. “Ahora se busca la personalización de espacios, la flexibilidad del producto. Hace años era impensable que alguien se pudiera comprar una casa a través de una aplicación y míranos ahora”, apunta.