Florentino Pérez sigue buscando inquilino para el banquillo del Real Madrid el año que viene. Y las perspectivas no son halagüeñas porque el perfil del técnico que busca el presidente no aparece, bien porque alguno de la lista no es permeable a los consejos, bien porque no convencen al vestuario o al entorno con el que consulta el dirigente blanco. El asunto es que es a día de hoy, se maneja una lista de cinco nombres, pero podría ser que ninguno de ellos se siente en el banquillo del Bernabéu la próxima tempoirada.
El presidente tanteó a Jose Mourinho, quien descartó su regreso al Real Madrid tras agradecerle el ofrecimiento. El portugués, y especialmente su familia, no guardan un buen recuerdo de su crispada estancia en el Real Madrid. El siguiente en la lista de Pérez era el técnico alemán Jurgen Klopp. El alemán deja el banquillo del Borussia Dortmund este verano tras llevarlo a una final de Champions y a la consecución de la Liga. El problema de Klopp es que es un técnico poco obediente que no atendería a los consejos de Florentino con la prestancia que a este le gustaría.
Aparecen luego dos entenadores españoles que nunca han sido considerados una opción prioritaria. El primer nombre es el de Rafa Benítez, técnico contrastado en Europa tras su paso por Liverpool, Inter, Chelsea y Nápoles. Sin embargo, los informes advierten que Benítez gobierna los vestuarios con mano de hierro, motivo por el cual no es especialmente popular entre los jugadores del equipo blanco. Mientras que a Julen Lopetegui, con quien Florentino ha mantenido varias conversaciones, se le contempla como una opción a medio o largo plazo.
El quinto nombre es el de Zinedine Zidane. El francés ha completado una decepcionante temporada en el Castilla, lo que ha arruinado sus posibilidades de suplir a Ancelotti. Florentino siempre ha pensado que es el sustituto natural de Carletto y el entrenador natural del Real Madrid, como en su día lo fue Guardiola del Barcelona. De hecho, Zizou no ha querido escuchar ofertas de clubes de su país, aunque dos equipos se han mostrado muy interesados en hacerse con sus servicios. El entorno del presidente le ha advertido que la responsabilidad llegaría demasiado temprano para Zidane, quien no ha sido capaz de gestionar el problema de la convivencia de Odegaard con los jugadores del filial. Una opción que parece alejarse.
Y dado el contexto, no hay que descartar que Ancelotti se quede el año que le queda de contrato, aunque la posibilidad es remota si atendemos a la credibilidad que otorga el presidente al italiano. En la Junta Directiva hay opositores a la mano blanda con la que gestiona el italiano, algo de lo que se ha reído el italiano en público. Pero también hay voces autorizadas del mundo del fútbol han recomendado al presidente que mantengan a Carletto. Quien además cuenta con el respaldo de los pesos pesados del vestuario. Y a todo se suma que Ancelotti 'escucha' a Florentino. Así que el nombre del inquilino del banquillo madridista pra la temporada 2015-16 es toda una incógnita. Salvo para el presidente.
