Ihor Surkis, presidente del Dinamo de Kiev, reveló que la UEFA les dio tres cuartos de hora para ofrecer un estadio fuera de Ucrania para acoger este jueves el duelo de la Liga Europa entre su equipo y el Valencia, que debía jugarse en la capital ucraniana pero que ha sido trasladado por las violentas protestas que vive la ciudad.
"La UEFA nos dio 45 minutos para ofrecer un estadio fuera de Ucrania", explicó Surkis en declaraciones al canal 'Football 1' que recoge la web de su club. El dirigente ucraniano explicó que en ese momento llamó a sus "amigos chipriotas" y cerraron un trato. El choque se disputará finalmente mañana en GSP de Nicosia, con capacidad para más de 20.000 aficionados.
El Valencia, por su parte, tras esperar varias horas en el aeropuerto de Manises sin saber si debía partir hacia Ucrania, puso rumbo a Chipre a primera hora de esta tarde. Su presidente, Amadeo Salvo, confirmó que el partido contra el Dinamo de Kiev, correspondiente a la ida de dieciseisavos de final de la Europa League, se disputará finalmente en Nicosia.
El Valencia llegó a embarcar en el avión, pero el presidente de Ucrania, Viktor Yanukovich, decretó día de luto nacional tras los disturbios que han dejado de momento un balance de 26 muertos, lo que conlleva la no celebración de eventos deportivos ni de carácter lúdico.
La plantilla 'che' se bajó del avión y se desplazó a un restaurante cercano al aeropuerto para almorzar mientras Amadeo Salvo realizaba las gestiones con la UEFA y con su rival de este jueves para buscar una solución. Finalmente, el presidente del Valencia confirmó que el partido se disputará a las 19 horas en Nicosia.
Salvo pidió comprensión con la UEFA ante la incertidumbre creada. "Hay veces que es difícil para la UEFA. Se tiene que valorar la situación de nuestro rival, que tiene una afición y unas entradas vendidas. No es fácil cambiar un partido de la noche a la mañana. Quizá se podía haber tomado la decisión este martes, pero se ha tomado hoy y ya está", zanjó.