Faltan pocas horas para que 'El hijo del Capitán Trueno' vea la luz. Este libro, uno de los más esperados del año, cuenta las memorias de Miguel Bosé, unas “memorias de una vida excepcional” como aseguran desde la editorial, que ha servido un pequeño aperitivo a los fans del cantante, confirmando que este libro promete dar mucho de qué hablar.
En medio de la expectación que genera todo lo que Miguel Bosé pueda contar, el primer extracto del libro ya ha hecho correr ríos de tinta. Y no es para menos. En primera persona, el cantante relata uno de los duros episodios que vivió junto a su padre, Luis Miguel Dominguín, y que cambio tanto su vida y su relación con su padre, como la que este tenía con su madre, Lucía Bosé.
“En ese preciso instante, me rendí para siempre. Entendí que nunca conseguiría estar a la altura de sus expectativas, que él nunca estaría orgulloso de mí porque era débil, que nunca iba a quererme, que yo no era el hijo que él esperaba que fuera, y ahí, con diez años, tirando en medio de África, decidí que para qué esforzarme más.”
Con esas palabras, Miguel Bosé resume cómo se dio cuenta de que nunca podría ser quien su padre quería que fuera. Algo que descubrió tras un viaje que padre e hijo hicieron de safari a Mozambique con la intención del torero de que su hijo “hiciera cosas de hombres”.
El infernal viaje de Miguel Bosé a Mozambique
En este extracto, Miguel Bosé cuenta cómo en el viaje, y por dejadez de su padre, contrajo paludismo, enfermedad que casi le cuesta la vida, y que no despertó ningún sentimiento en el torero, quién le llegó a decir: “Venga, no seas nenaza, levántate y camina como un hombre y déjate de mareos o te vas a enterar lo que es uno de verdad del tortazo que te voy a meter”.
A través de sus recuerdos, Miguel también cuenta un turbio episodio de ese viaje: “Mi padre intentó que una bellísima nativa de dieciséis años, de ojos muy blancos que resplandecían a la luz de la hoguera, me iniciase en la hombría”. Tras ser disuadido por el guía del viaje, quien le reprochó que el niño tan solo tenía diez años y podría contagiarse de alguna enfermedad, “la agarró del brazo y se la llevó a su cabaña”.
Un viaje convertido en un infierno que terminó tras su llegada a Madrid, con 20 kilos menos, enfermo y casi inconsciente. Allí le recibió su madre y su Tata, quienes velaron durante días por su vida a la espera de que el médico pudiera hacer algo por él.
En sus memorias, Miguel Bosé confiesa que su padre también cayó enfermo “pero se refugió en Villa Paz”. “Se curó él solo, según fue contando luego. ¿La verdad? Mi madre le echó de casa nada más llegar de África y le dijo que no quería verle en el resto de sus días” apunta el cantante, que además señala que la otra verdad de esta historia es que su padre se instaló en la finca junto a su prima Mariví “para cuidar bien de él”.
Un libro de memorias por la vida de Miguel Bosé
Con este pequeño adelanto, de lo que promete ser la versión más sincera y sin prejuicios de su vida, Miguel Bosé también dedicará palabras para algunos reconocidos personajes que pasaron por su vida, como Picasso o Helmut Berger, y la cara menos amable de estos; Sofía Loren, Claudia Cardinale, John Wayne o incluso las fiestas con la familia González Flores.
A partir del 10 de noviembre, 'El hijo del Capitán Trueno' nos descubrirá los episodios desconocidos en la vida de Miguel Bosé, un cantante en el ojo mediático desde su nacimiento. Un libro que, según la editorial, narra la historia de “unos niños perdidos a merced de un padre todopoderoso, acostumbrado a que su voluntad fuera ley, y una madre arrolladora de belleza legendaria”.