Las dudas sobre la durabilidad del actual Gobierno comienzan a reflejarse en todos los informes macro publicados. Los últimos en sumarse al carro han sido los analistas de Bankinter, que subrayan la posibilidad de que las elecciones se adelanten.
En su último informe trimestral, la entidad naranja asegura que uno de los principales riesgos para la economía española es la falta de claridad que existe de cara a los próximos Presupuestos.
El equipo de análisis recuerda que Sánchez cuenta con tan solo 84 diputados. Esto supone que cualquier implementación o cambio de una reforma exige el consenso de "un Congreso muy fragmentado".
Bankinter detalla que para que se aprueben los PGE, el Ejecutivo tendrá que realizar "concesiones a determinados grupos políticos que podrían terminar impactando en el gasto público".
Incremento de la presión fiscal
Pero el equipo de análisis no se ha parado ahí. También ha entrado a valorar el enorme riesgo que supone para la economía española, cada vez más frágil, incrementar la carga impositiva a ciertos sectores. Entre las alternativas que se barajan se encuentran las transacciones financieras, el IRPF (fundamentalmente a las rentas más altas), el impuesto al diésel, los depósitos o las sicavs.
El peligro que identifica la firma es que dichas alzas podrían terminar impactando en el consumo privado, en un contexto en el que algunas de las partidas del PIB están mostrando síntomas de desaceleración, como el sector exterior o el consumo.
Imposible aprobar unos Presupuestos
El Gobierno solo se ha sentado a negociar con Unidos Podemos y por el momento no han acordado ni un techo de gasto. La casa por el tejado parece que es el lema de la nueva Ejecutiva, que curiosamente ya ha pactado con el partido morado algunas cosas como la modificación de la Ley de Estabilidad, las pensiones ligadas al IPC y alguna que otra subida de impuesto, incluso una en el IRPF que grave a las rentas que superen los 150.000 euros.
Pero aún con el equipo de Pablo Iglesias, Pedro Sánchez no puede sacar adelante unos Presupuestos. Necesita a todas las formaciones que lo apoyaron en la moción de censura y tras los últimos altercados producidos en Cataluña parece que es prácticamente imposible que los partidos independentistas voten sí a cualquier propuesta que venga de un Gobierno que no les de lo que quieren.
Por lo tanto, sólo queda la opción de prorrogar los Presupuestos con los que ahora trabajar, que son del PP. Todo esto debería llevar a un adelanto moral de las elecciones ante la imposibilidad de gobernar.