El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha citado hoy a comer a los principales DirCom (Directores de Comunicación) de las empresas y bancos catalanes para analizar los resultados de las elecciones generales del 26J y el complicado escenario que se abre para el proceso independentista tras el triunfo de Mariano Rajoy.
Según las fuentes consultadas, el almuerzo, que ha tenido lugar en el Palacio de la Generalitat, es el primero que celebra el presidente del Govern con los representantes del empresariado catalán desde su llegada al cargo.
Estaba previsto desde hace días, pero la cita parece crucial a tenor de lo ocurrido el 26J. El peor escenario para el independentismo que lidera, entre otros, el propio Puigdemont se dibuja estos días en Madrid, ante las grandes posibilidades de que Rajoy consiga los apoyos suficientes para seguir en Moncloa otros cuatro años más.
Las esperanzas de que el sorpasso de Podemos al PSOE y un gobierno de progreso se instalara en Moncloa se desvanecieron en la noche del 26J y Puigdemont ha compartido impresiones con los máximos responsables de comunicación de entidades como Gas Natural Fenosa, Abertis, CaixaBank y Banco Sabadell, entre otros.
Sobre la mesa el temor del president a que Rajoy continúe con la línea de inmovilismo que ha venido desarrollando en los largos y duros años de la pasada legislatura que aún dirige en funciones.
De puertas adentro, Puigdemont también quería compartir, en el más absoluto plano institucional, sus preocupaciones internas tras la ruptura con la CUP y la paralización de los presupuestos catalanes.
El bloqueo institucional en Cataluña y el temor a cuatro años más de Rajoy han centrado el almuerzo.
