ACS y Electren se han adjudicado en consorcio un contrato del Corredor Mediterráneo a su paso por Tarragona por un importe de 30,7 millones de euros, según informó Adif. Se trata de la implantación del ancho internacional (AVE) y un tercer carril ferroviario en el tramo de vía comprendido entre Sant Vicenç de Calders, Tarragona y el Nudo de Vila-seca (Tarragona).
El trazado, de 37 kilómetros de longitud, da continuidad al tramo Castellbisbal-Martorell-Sant Vicenç de Calders. Además, las obras permitirán crear conexiones en ancho internacional a centros logísticos y de producción importantes como el Puerto de Tarragona y las instalaciones ferroviarias de la farmacéutica y química Bayer y de la química Ercros.
Para implementar el ancho estándar europeo (AVE) se instalará un tercer carril en las vías, de forma que contarán con un ancho mixto; se sustituirán las traviesas por otras aptas para tres carriles y se renovará el balasto, entre otras actuaciones.
También se realizarán trabajos de plataforma, se adecuará el sistema de electrificación y se llevarán a cabo actuaciones en las estaciones de Vila-seca, Torredembarra, Altafulla-Tamarit y Tarragona, así como en el centro logístico de Tarragona-clasificación.