La adjudicación por parte del Ayuntamiento de Madrid del contrato de recogida de basuras de la periferia a la UTE Urbaser-Cespa, cuya oferta incluía una baja superior al 10%, supone un episodio más de la agresiva estrategia que está llevando a cabo la filial de servicios medioambientales de ACS para acaparar contratos de este tipo en España, un mercado que en los últimos tiempos se le estaba resistiendo.
El caso de Madrid ha sido el más llamativo por el hecho de que los sindicatos se han puesto en pie de guerra por los temores a que la baja en el precio tenga repercusiones negativas para los trabajadores. Pero no ha sido, ni mucho menos, una excepción en la actividad de Urbaser en los últimos tiempos. Al contrario, echando un vistazo a las cifras la oferta realizada en Madrid no ha sido la más agresiva de las que se han registrado en los últimos meses.
La situación más llamativa se ha dado en el municipio de Arrecife (Lanzarote, provincia de Gran Canaria). A comienzos de agosto, Urbaser se hacía con el contrato de limpieza viaria y recogida de residuos sólidos de la localidad por algo más de 62 millones de euros, IVA incluido, lo que supone una baja del 18% en relación con el presupuesto de la licitación.
La adjudicación del contrato, que cuenta con una duración de doce años, levantó ampollas y no sólo por la notable baja de la oferta que finalmente se hizo con el contrato (en competencia con otros tres grupos) sino también por el hecho de que la propia Urbaser se vio envuelta en un escándalo en Arrecife como consecuencia de un caso demostrado de corrupción en la adjudicación del anterior contrato de recogida de residuos.
Varios directivos de la compañía fueron condenados tras el reconocimiento por uno de ellos de la existencia del pago de sobornos para hacerse con el contrato, según recogió en su día la prensa local. Ni los precedentes ni la notable baja de la oferta han detenido a Urbaser en Lanzarote.
Dos Hermanas, Tenerife
Tampoco en Dos Hermanas, populosa localidad próxima a Sevilla, en la que Urbaser ha logrado renovar el contrato para el mantenimiento de zonas verdes. Eso sí, con un significativo descuento próximo al 15% sobre el precio de licitación. Un caso similar se ha dado en Santa Cruz de Tenerife, donde Urbaser también se ha hecho con la licitación de recogida de residuos urbanos y limpieza urbana con una oferta netamente a la baja.
Durante los últimos meses, Urbaser se ha hecho con numerosos contratos en el exterior, un éxito que no había replicado en España, hasta el punto de que ACS ha amenazado en más de un ocasión con dejar de licitar en el mercado interno.
Sin embargo, su estrategia ha sido en realidad otra: ofertas agresivas, prácticamente imposibles de hacerlas rentables para lograr los contratos. Detrás de las salvajes huelgas de recogida de basura registradas en ciudades como Jerez y Lugo estaba el nombre de Urbaser.
En Madrid, ACS quedó sorprendentemente fuera de la licitación para la limpieza y mantenimiento de zonas verdes, una circunstancia que incomodó especialmente a Florentino Pérez. Sin embargo, la respuesta de la compañía no se ha hecho esperar, de tal forma que se ha hecho con los contratos de basuras de la periferia y también del servicio de recogida de residuos urgente con oferta a la baja.
