Lleva semanas moviendo teléfonos para evitar la debacle de 'su' caja. "Braulio (Medel) no va a permitir que el test de Oliver Wyman se lleve por delante a Unicaja. Sus movimientos son claros: romper la fusión con CEISS (el banco de Caja España-Duero) y negociar un futuro con otro socio (como adelantó la pasada semana Vozpópuli)", aseguran desde su entorno. Lo primero, lo tiene prácticamente conseguido; en lo segundo anda estos días. Medel quiere que Unicaja se integre en una entidad sin problemas de solvencia y, en las últimas semanas, ha mantenido contactos con los responsables del Sabadell y Bankinter, según confirman fuentes del sector.
Ambas entidades quedarán encuadradas con toda probabilidad por Oliver Wyman en el Grupo 0, es decir, no presentarán déficit de capital. "Cumplen a la perfección con el perfil de socio que está buscando Medel", explican desde el entorno del banquero malagueño. Las negociaciones se encuentran en una fasa inicial a la espera de conocer los números definitivos de Unicaja y, sobre todo, saber cómo acaba la actual relación con Caja España-Duero.
Medel parece haber conseguido ahora lo que Economía le negó tras el primer Plan Guindos. Si entonces le concedió una suerte de Esquema de Protección de Activos (EPA), mediante la inyección en Caja España-Duero de 475 millones en forma de 'bonos convertibles', lo que impidió al banquero malagueño romper con la operación, ahora el enorme déficit de capital que tendrán que reponer las antiguas cajas castellanoleonesas hace inviable continuar con la operación.
Medel quiere que 'su' caja se integre en una entidad que no esté bajo sospecha. Como en todas sus negociaciones, exige tener una elevada cuota de poder
"Con la medida de los 'cocos', tanto el Banco de España como Economía intentaron evitar a toda costa tener que intervenir a Caja España-Duero. Ahora, con las cifras que arrojará el test de estrés de Oliver Wyman, ese final parece inevitable para los castellanos. Unicaja, por su parte, necesitará ayudas pero en un nivel asumible, lo que le sitúa en una buena condición para negociar otra salida", refrendan desde el sector.
El informe de Merrill Lynch, el más cercano a lo que pueden ser las cifras oficiales de Oliver Wyman, estipulan en el escenario más adverso unas necesidades de capital para Unicaja de 93 millones de euros. En los cálculos de Merrill Lynch no se incluye a Caja España-Duero. Las estimaciones de una auditora, sin embargo, eleva el déficit de capital de la entidad castellana en más de 2.500 millones de euros, lo que abocaría al proyecto común directamente al Grupo 2 (entidades que recibirán de forma inmediata la ayuda del estado sin posibilidad de encontrar financiación privada).
Como en todas las operaciones en las que ha participado Medel, el presidente de Unicaja continua exigiendo una importante cuota de poder en la entidad saliente de la fusión. "Si no cambia esa actitud tendrá difícil encontrar un compañero de viaje porque la posición de fuerza de Unicaja es ahora completamente diferente a cuando existía el mapa de las cajas", explican desde una entidad.
Las negociaciones de Medel con sus posibles socios se acelerarán a partir del próximo viernes cuando se hagan oficiales los resultados del test de Oliver Wyman. Precisamente, la consultora norteamericana ha comunicado ya a Bruselas que las necesidades de la banca española rondarán los 60.000 millones y que un total de seis entidades (Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell, Kutxabank y Bankinter) tendrán un exceso de capital.
