Endesa cerrará una etapa el próximo mes de abril, cuando su todavía presidente, Borja Prado, ponga fin a una década al frente de la eléctrica. Enel, accionista mayoritario de la eléctrica española, aprovechará la circunstancia para centrar la estrategia de su filial exclusivamente en buscar la mejor posición posible en el negocio energético, sobre todo en España. Para eso, su actual consejero delegado, José Bogas, tendrá todo el poder ejecutivo en sus manos, mientras que para sustituir a Prado, Enel buscará un perfil completamente diferente.
Enel quiere dejar atrás una etapa caracterizada por operaciones como la adquisición de los activos que Endesa tenía en Latinoamérica o la adquisición por parte de Endesa de Enel Green Power. El objetivo es que la compañía española tenga la mejor posición posible con vistas a afrontar la transición energética.
Enel da el poder a Bogas
Para ello, la empresa italiana considera que el perfil más adecuado es el del actual consejero delegado, José Bogas, que pasará a asumir todo el poder ejecutivo, al contrario de lo que ha sucedido hasta el momento, cuando lo ha compartido con Borja Prado. Bogas es un perfecto conocedor del negocio energético, un perfil técnico, alejado del financiero que presenta el aún presidente de la eléctrica española y que a Enel le ha sido de gran utilidad, especialmente en los primeros años a partir de hacerse con la participación mayoritaria en Endesa.
Sin embargo, los planes de Enel con Endesa no son los mismos que antaño. De ahí que para sustituir a Prado, la empresa italiana piense en un presidente que no tenga funciones ejecutivas y que, además, tampoco tenga intereses en otro tipo de negocios, como era el caso de Borja Prado, hasta hace poco el hombre fuerte de la entidad financiera italiana Mediobanca en España.
La opción de Juan Rosell
Tras el anuncio de que Prado no renovará como consejero de Endesa en la próxima junta de accionistas, el nombre que más ha sonado para ocupar su puesto es el de Juan Rosell, ex presidente de la CEOE.
En principio, el perfil de Rosell encaja con la figura que busca Enel para ocupar la presidencia no ejecutiva de Endesa, aunque la decisión aún no está tomada. En su día, el nombre de Rosell también sonó para la por entonces denominada Gas Natural Fenosa, hoy Naturgy, cuando la etapa de Rafael Villaseca como consejero delegado de la compañía tocaba a su fin.
Fuentes conocedoras de la situación apuntan que el que fuera máximo responsable de la patronal es el candidato mejor colocado para suceder a Borja Prado y que incluso hubo algunos acercamientos hace meses para conocer la disposición de Rosell. Según las citadas fuentes, la respuesta fue afirmativa aunque, posteriormente, los contactos dejaron de producirse a la espera de la decisión que finalmente se tomara con el futuro de Borja Prado.
Endesa tiene por delante el desafío de llevar a cabo su plan estratégico y de afrontar la transición energética con un mix que presenta aún muchos activos de tecnologías tradicionales (como el carbón y la nuclear) que tendrán que echar el cierre en los próximos años.
Por el contrario, la compañía ha sido una de las que ha desarrollado en mayor profundidad el coche eléctrico, una estrategia que representa una de las principales apuestas de futuro de Endesa.