El verano es un tiempo propicio para disfrutar del descanso y escapar un poco de la rutina diaria. Pero esto no debe implicar un gasto desorbitado para nuestro bolsillo que descuadre nuestro presupuesto anual. EFPA España ha elaborado un documento que recoge algunos consejos para que nuestros ahorros no sufran demasiado durante las vacaciones.
1. Elabora un presupuesto
Controla tu techo de gasto en vacaciones. De ahí que sea importante elaborar un presupuesto cerrado del dinero que necesitaremos invertir en nuestras vacaciones, en función de los lugares que queremos visitar y las actividades que realizaremos.
2. Si viajas al extranjero, cuidado con las comisiones y la divisa
A la hora de viajar al extranjero, es muy importanteprestar atención a las comisiones que nos cobrarán por sacar dinero en las entidades del país de destino. También debemos atender al cambio de divisa. Observar sus fluctuaciones, elegir el mejor momento para cambiar y dirigirnos a nuestra entidad bancaria para que nos resuelvan cualquier duda al respecto.
3. Prohibido endeudarse
Endeudarse exclusivamente para pagar las vacaciones es un error. Para minimizar nuestros gastos es crucial dedicar un tiempo a la comparación de precios en agencias, hoteles y establecimientos del lugar de destino, siempre prestando atención a la letra pequeña.
4. Cuida los pequeños gastos diarios
El verano es propicio para llevar a cabo actividades que suponen un gasto ‘extra’. Por ello, si cuidamos la manera en que realizamos estas actividades diarias, podremos notarlo en nuestras facturas.
5. Aprovecha las tarjetas descuento.
Las tarjetas de descuentos que promocionan tanto bancos como empresas con el fin de fidelizar a sus clientes a través de descuentos pueden resultar de gran utilidad de cara a ahorrar, sobre todo en gasolina, un gasto que se eleva durante estos meses.
6. Planifica tu patrimonio también en verano.
El asesoramiento financiero profesional nos permitirá saber hasta dónde podemos llegar, tener en cuenta la fecha de vencimiento de algunos productos financieros, cuyas condiciones suelen cambiar en septiembre, y mantener a buen recaudo nuestras inversiones en distintos activos financieros también en verano, un periodo marcado por la volatilidad en los mercados.
7. De cara al nuevo curso, atento a los nuevos productos.
Tras las vacaciones, hay que tener en cuenta que se multiplican los productos ‘gancho’ que tienen como finalidad ayudar en momentos de escasez de tesorería, pero que aparejan desventajas importantes. Los préstamos al consumo tienen tipos muy altos, las tarjetas de crédito también han sufrido subidas de los tipos de interés y el uso de los descubiertos provoca un coste importante.
8. Solicita tu cita con un asesor financiero certificado
Coincidiendo con la vuelta a nuestra rutina diaria en septiembre es un buen momento para acudir a tu entidad de confianza y solicitar una cita con un asesor financiero certificado para que resuelva todas las dudas sobre hipotecas, ahorro para la jubilación, productos financieros más adecuados…